Lo primero que tenemos que considerar es que la economía global continuará con una muy lenta recuperación y lo segundo es que por lo mismo la recuperación económica tiene menos riesgos y por lo tanto puede propiciarse una consolidación estable aun cuando, como lo he comentado en otro de mis artículos hacia el futuro inmediato, se verá lo que suceda en EU en la medida en que se vayan retirando los apoyos económicos por parte del gobierno y eso lo tiene muy presente Janet Yellen de la Fed, quien destacó que se mantendrá el curso del recorte del estímulo, sin embargo, por lo pronto se han reflejado abruptas caídas en las monedas de los mercados emergentes con los consiguientes estragos en los mercados financieros.
Los inversionistas han estado debatiendo sobre el tema de la repentina caída en las acciones en todo el mundo y entre las posibles razones figuran precisamente las reducciones en las compras de bonos de la Reserva Federal; las señales de advertencia abundan: la caída de las bolsas en todo el mundo, los decepcionantes datos económicos de China y Estados Unidos, la brusca alza de las tasas de interés en algunas de las principales economías emergentes y que, por cierto, por el momento no han afectado a México, sin embargo hay que considerar lo dicho por el gobernador del Banco de México que es previsible la posible salida de capitales que busquen mayores rendimientos.
En concreto este comportamiento favorable hacia México es una señal de la ventaja de nuestro país debido a la estabilidad económica y financiera en relación a otros países, sin embargo hay que considerar que mundialmente están cambiando en forma continua las percepciones de los mercados de un rango optimista a otro pesimista continuamente.
Por lo anterior conviene analizar el aspecto comercial y someramente sobre este particular podemos comentar que la actividad manufacturera en EU se contrajo en el mes de enero y puede continuar principalmente por el comportamiento climático que afectó la actividad fabril en varias regiones a lo largo del país y el índice de confianza del consumidor también se ha deteriorado; es aquí mi escepticismo sobre la información del repunte exportador por parte de China, ya que sorprende el fuerte crecimiento y en cambio según las fuentes CEIC no hay punto de comparación de lo que refleja Corea del Sur y Taiwán según Wall Street Journal ya que dichas economías se benefician de las mismas tendencias comerciales de China, por lo tanto no existen datos confiables del exceso de las exportaciones reportadas por China y por lo tanto en un momento dado puede haber una sorpresa que se refleje en el crecimiento global.
Es indudable que en China ocurrirán cambios financieros y comerciales ya que se está dando un giro para una reafirmación del control económico y político por Beijing y es de esperarse que los cambios tecnológicos producirán cambios geopolíticos y no debemos olvidar que Japón ha estado en espera de algunas oportunidades que le permitan su propia alianza bien sea con Asia o con los Estados Unidos.