Actualmente, existen muchos promotores de la lectura, y esto parece una moda de la cual todo mundo habla sin que se sepa a ciencia cierta cuál es la profundidad del tema. Es más, se me antoja pensar que hay algunos que promueven el hecho de leer sin estar muy convencidos o sin que ellos mismos lean; se nota a la hora de referirse a los libros recomendados, algunos de los cuales son producto de la mercadotecnia.
La primera pregunta que se haría es: ¿por qué se debe de leer? La respuesta generalizada es para tener cultura. Y aquí se suscita un nuevo problema: el de tener cultura, una palabra, que si ustedes buscan una definición de ella, no van a encontrar dos iguales. Así que, cultura son las bellas artes, o cultura son los usos y costumbres de los pueblos, o la cultura es el acumular la información sobre un tema o cultura es… ya me perdí, pero aunque esté perdido, existen centros culturales, que lo mismo se pueden llamar educativos.
Lectura, cultura y educación, son partes de un todo íntimamente ligado que se escapa a la comprensión de muchos. La pregunta se extiende: ¿por qué debemos de leer?, ¿por qué debemos de tener cultura?, ¿por qué debemos de educarnos? Mientras que no tengamos una razón para ello, las recomendaciones sobran.
Se supone que nos educamos para obtener una mejor opción laboral. En el mundo capitalista en que vivimos, los títulos han ido perdiendo su valor. Si hace cincuenta años una licenciatura era algo, hoy ya no es nada y se piden maestrías y doctorados. Si eso reflejara un alto nivel de conocimientos sociales, uno se alegraría, pero me parece que el sistema está pervertido, porque el estudio se realiza por la consecución del título y no para la obtención de un conocimiento. Dicho en otras palabras, para obtener un título, hoy en día, no se hacen necesarios los conocimientos que los respaldan. Cuántos titulados existen que son incultos y que no han tenido en su vida la necesidad de leer. Con aplicar una técnica bien aprendida, les puede ir bien en su profesión.
Entonces, volvemos al problema: un sistema como el nuestro, ¿para que está promocionando los buenos hábitos de la lectura? La sociedad capitalista necesita que sus ciudadanos tengan capacidades mínimas para acercarse la información necesaria para poder laborar; o sea que, la educación puede tener fines prácticos concretos, a eso se le ha reducido, al hacer.
Pero al hombre no se le puede reducir el hacer, porque el hombre "es". Ya me metí en el campo de la filosofía, que es una de las tantas expresiones culturales. ¿Cuál es la finalidad de la filosofía? Decidir cuál es la verdad o qué es la realidad, con la finalidad de darle un sentido o descubrir un sentido. Los antiguos filósofos se daban cuenta que muchos de los conceptos que operaban en la sociedad eran solamente mitos; o sea, historias que no pertenecían a la realidad. Intentaron encontrar un método para dar con la verdad. Hasta ahora, no han encontrado mucho, pero de la filosofía se derivó la ciencia en donde han existido más hallazgos y los sigue habiendo.
Leer es irnos enterando de todos esos hallazgos y aplicar esa información a los problemas de la vida moderna. Sigo moviéndome en el campo de la practicidad inmediata. La pregunta que sigue es: ¿el hombre se reduce a esto? Si considera que el hombre es algo más, entonces hay que ir a la búsqueda del hombre, que no está solo, sino que tiene una relación directa con la naturaleza y además posee una historia que nos ha traído hasta donde estamos. Ya no sólo se busca qué es el hombre sino qué hemos hecho del hombre; es lo mismo que cuestionarnos sobre qué es la sociedad o qué hemos hecho de nuestras sociedades.
Hasta donde se puede llegar, hasta donde quieras; saber que el universo se expande, tener referencia y probar el big bang, introducirte al mundo incomprensible, aun de la física cuántica. O no volar tan lejos, entender nuestros problemas cotidianos para darles las soluciones apropiadas.
La lectura es uno de los tantos medios para obtener la información necesaria que necesitas sobre la realidad. Mucha información existe, sólo hace falta que la conozcas. Pero no sólo sobre la realidad sino sobre sus interpretaciones, que en eso se convierten las obras de ficción, lo que comúnmente llamamos literatura, una visión subjetiva y necesaria de la realidad que enriquece su concepción. Parecería contradictorio que si el conocimiento trate de eliminar al mito, por otro lado, yo esté fomentando el consumo de la ficción. Me parece que son dos caras de la misma moneda sin las cuales el hombre no podría vivir o alimentar su conciencia: pero usted no se conforme con lo que yo digo, busque información, lea, vea películas, buenos programas de televisión.