Defensa. Marcelo Orellana enseña a sus alumnos los sistemas de autodefensa de origen israelí como el Kapa y el Krav Magá en su centro ubicado en Filadelfia.
Porque hoy en día hombres, mujeres y niños pueden ser víctimas de secuestradores, violadores y hasta de un simple ladrón, es necesario aprender a defenderse con todo lo que esté al alcance o simplemente con el cuerpo, que puede convertirse en una herramienta letal contra el enemigo.
Técnica
Para lograrlo, Marcelo Orellana Barrientos, de origen chileno, ofrece técnicas de autodefensa, dando a conocer a sus alumnos los principales puntos de dolor del cuerpo y cómo acceder a ellos con el mínimo esfuerzo.
Es en la colonia Filadelfia de Gómez Palacio, sector que aún "vive" y "sufre" por la presencia de un violador serial, en donde nace la escuela del chileno hace ya poco más de dos meses.
Con experiencia como instructor militar en la Marina de su país por más de ocho años, Marcelo ofrece las disciplinas de Kapap y Krav Magá, poco conocidas en la región. "Son un tipo de defensa personal. No es un arte marcial, es meramente defensa persona, donde no se juega limpio, aquí puedes utilizar las manos, la cabeza, una llave, una pistola, lo que tengas a mano lo puedes usar para defensa".
Señala que ambas nacieron en Israel dentro del ejército y fuerzas especiales antiterroristas y de ahí comenzó a difundirse hacia los Estados Unidos y otros países.
"La gracia de esto y lo bueno de esto lo que es el kapap, krav magá y defensas especiales es que estamos tratando de hacer algo fácil, práctico y que tenga la mayor eficiencia con el mínimo esfuerzo, aquí cualquier mujer puede hacer las técnicas igual que un hombre", asegura el instructor.
Dentro de sus prácticas se hace uso de golpes, agarres, ataques con cuchillo, pistolas, esposas, macanas o (Pr24), entre otras herramientas que puedan ser utilizadas por el agresor. En esta práctica no se hace uso de herramientas verdaderas, pero sí de réplicas exactas, a fin de mantener la integridad de los asistentes.
La estatura, peso o condición física de quien lo práctica no son un factor relevante, pues en estas clases de autodefensa se aplica el refrán "más vale maña que fuerza".
Y es que Orellana enseña algunos de los puntos más vulnerables para cualquier persona, que van desde los genitales, hasta dislocar un hombro, una muñeca o simplemente, apretar fuertemente la palma de la mano, puntos que harán que el agresor quede abatido.
Estos sistemas de defensa, como su nombre lo dice es para ello y no para generar más violencia, ya que lo que se busca es que la víctima pueda librarse de su victimario, pueda resguardarse y pedir ayuda. "Sólo es defensa, no es para incitar a pelear, nada de la violencia", recalca.
Oportunidad
En el mercado estas técnicas se ofrecen hasta por 2 mil pesos mensuales, pero Marcelo las ofrece a un cuarto de esta cantidad, a fin de que la gente se anime y se capacite, sobre todo las mujeres.
En este sector en donde se encuentra instalada la escuela son pocas las mujeres que acuden, "tal vez por vergüenza, por desconocimiento o simplemente porque sus parejas no lo permiten", dice Orellana, quien a todas ellas las invita a sumarse.
Dice que hoy en día la mujer es más independiente, por lo tanto, pasa la mayor parte de su día sola, conduciendo, trasladándose de un lugar a otro, lo que la vuelve más vulnerable.
Invitación
Como una herramienta de defensa, el 31 de mayo, Marcelo Orellana Barrientos ofrecerá un curso de capacitación antisecuestro, el cual se impartirá en su escuela en Filadelfia.
