En México 1986, Maradona metió un golazo ante Inglaterra. En ese torneo Argentina levantó su segunda Copa. Es América para los americanos
Cada vez que un Mundial se celebra en nuestro Continente, la primera frase que emplea la afición de éstas tierras es: "América para los americanos".
En la historia de la FIFA se han realizado ocho Copas del Mundo nuestro continente y en esas competencias sus selecciones han hecho valer su conocimiento de las canchas, su mejor adaptación al clima e imponen su calidad, para mostrar una supremacía sobre los de otras Confederaciones.
En este Mundial del 2014 de los 10 equipos de Concacaf y Conmebol ocho lograron su pase a los octavos de final, siendo Honduras y Ecuador los que quedaron eliminados.
MEJORES, DESDE EL INICIO
En el Mundial de Uruguay 1930, nueve fueron las selecciones de América (Argentina, Uruguay, Estados Unidos, México, Bolivia, Perú, Chile, Paraguay y Brasil) y cuatro de Europa: Yugoslavia, Rumania, Bélgica y Francia.
Luego de disputarse la primera fase y por el sistema de competencia en que sólo los primeros lugares de cada sector iban a semifinales directas, charrúas, pamperos, gringos y balcánicos se ubicaron en esos lugares y como ya se sabe, los anfitriones derrotaron 4-2 en la final a los argentinos.
El segundo Mundial que se celebró en Sudamérica fue en Brasil en 1950. Allí participaron también 13 equipos, pero en esta ocasión siete fueron los representantes. (Bolivia, Brasil, Chile, Estados Unidos, México, Paraguay y Uruguay), de los cuales los cariocas y los celestes pasaron a la siguiente fase, junto con España y Suecia, con los que disputaron otro all around en el que los uruguayos salieron campeones, tras vencer a la Canarinha.
CHILE PICANTE
Para la Copa que se celebró en el país andino, la innovación fue que hubo 16 selecciones por primera vez en América y también se utilizarían por vez primera la ronda de cuartos de final.
Para esta justa seis participantes eran del continente del país anfitrión (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México y Uruguay). De los ocho equipos que clasificaron a cuartos seis fueron europeos junto con Chile y Brasil.
El resultado fue que los cariocas vencieron a Checoslovaquia en la final y se proclamaron campeones y los anfitriones se quedaron con el tercer lugar al derrotar a Yugoslavia.
Para el siguiente Mundial en América, la pelota rodó en México, en 1970 y los invitados de este continente fueron: Brasil, El Salvador, México, Perú y Uruguay, de los cuales tres fueron a la segunda ronda del certamen. Sólo El Salvador y Perú se quedaron en la ronda de grupos. México cayó con Italia en cuartos y tanto uruguayos como brasileños se vieron las caras en semifinales y finalmente, los cariocas fueron campeones al vencer a los italianos.
Argentina tuvo su Mundial en 1978. Allí sólo cuatro representantes de América estuvieron en los grupos (Argentina, Brasil, México y Perú). Para la segunda fase México fue el único que quedó fuera en la primera ronda.
Pero por el sistema de competencia se clasificaron los dos primeros de cada uno de los cuatro grupos y se formaron dos nuevos sectores en la segunda fase. Así que Perú, Brasil y Argentina estuvieron en uno de ellos, por lo que los Ches lo ganaron y vencieron en la final a Holanda.
TAMBIÉN EN NORTEAMÉRICA
La siguiente cita fue en México en 1986, además del anfitrión fueron otros cinco invitados: Canadá, Uruguay, Paraguay, Argentina y Brasil. A la segunda ronda el único que no obtuvo su boleto fueron los de la hoja de maple.
Y en la final Argentina se llevó su segundo título Mundial al vencer en un emocionante encuentro a los alemanes 3-2 en el estadio Azteca.
Para Estados Unidos 94 estuvieron Colombia, Estados Unidos, Brasil, Bolivia, Argentina y México y para la segunda ronda los únicos que se quedan fuera son los bolivianos y los cafeteros.
A la postre, Brasil y Estados Unidos se enfrentan en cuartos y Brasil avanza hasta la final, en la que vence a Italia.
Es decir, las ocho veces que se ha celebrado el Mundial en América, las ocho veces el trofeo se queda en el Continente. Ahora, habrá que esperar.