Internado. Después de que le amputaron su pierna izquierda, Virgilio hoy saldrá del Hospital General de Torreón para emprender su camino y regresar a su país para encontrarse con sus hermanos.
Por culpa del tren, a Virgilio Escalón le amputaron su pierna. El hombre es de origen hondureño y justamente el pasado lunes, alrededor de las dos de la tarde, esperaba con ansias el sonido del tren para poder trepar al techo y emprender el camino que lo llevaría con destino a los Estados Unidos.
Sin embargo, en cuestión de segundos, el ferrocarril terminó por convertirse en su "peor pesadilla" y lamentablemente terminó con la ilusión que Virgilio tenía de poder encontrar un mejor empleo.
"El tren iba demasiado rápido, intenté subir y me resbalé, nunca perdí el conocimiento, yo iba con un compañero mexicano, pero cuando se dio cuenta de que me había caído, se asustó y salió corriendo. Cuando me trajeron los doctores al Hospital, firmé rápido los papeles para que cortaran la pierna, sentía mucho dolor", cuenta el migrante.
La desgarradora historia de este indocumentado inició desde que partió de su natal Zapotalito, que se localiza en el municipio de Macuelizo, departamento de Santa Bárbara, debido a la escasez de lluvia que impedía la siembra de maíz y frijol. Virgilio relata que era agricultor.
Con voz quebrantada, cuenta que en su país vivía en una casa de adobe y como no tiene esposa ni hijos, su hermana era quien lo visitaba para llevarle alimentos cuando llegaba de trabajar.
Luego de esta desgracia, dice que no tendrá opción más que regresar a Honduras para volver a iniciar desde cero, pero ahora con un esfuerzo mayor.
"Se va a impactar mi hermana cuando me vea llegar, me vio salir completo, pero es que yo estaba seguro de que nada me iba a pasar con la ayuda de Dios", relata el hombre.
Al migrante, lo acompaña únicamente una pequeña bolsa de hule en la que guarda solamente una playera y el teléfono de algunos amigos que dejó en el estado de Chiapas en su recorrido por alcanzar "el sueño americano".
Está internado en el Hospital General de Torreón y los médicos lo reportan como estable.
Desde ayer iba a salir, pero lo dejaron un día más porque no tiene pantalón ni zapatos, ya que los perdió cuando ocurrió el accidente.
Hoy será dado de alta y espera que los laguneros lo ayuden con ropa y unas muletas para poder regresar a su país y encontrarse con sus hermanos que ya lo esperan.