Cuando el hombre armado con una escopeta en una pequeña universidad de Seattle dejó de disparar para recargar su arma, otro estudiante lo atacó con gas de pimienta en aerosol, lo sometió con ayuda de otros y evitó varias muertes, dijo la policía ayer.
"Hay varios héroes aquí", dijo el subjefe de policía Paul McDonagh. Un joven murió y otros dos resultaron heridos cuando el hombre entró al salón Otto Miller en la universidad Seattle Pacific y abrió fuego el jueves por la tarde. Cuando hizo una pausa para recargar su arma, un estudiante lo desarmó. El hombre tenía más municiones y un cuchillo, dijo McDonagh.