Motivados. Los trabajadores son pieza clave en una organización. La motivación del trabajador es clave.
Levantar un negocio no es cosa fácil, sin embargo, con empeño y evitando los siete errores más comunes se pueden conseguir beneficios importantes. En tan sólo 40 días puede realizar un plan de acción y mejorar las ventas.
Nunca es tarde para enmendar los errores. Y si usted es dueño de una empresa está muy a tiempo de reparar e iniciar un plan de acción que le genere importantes beneficios. Para Luis Carlos de la O Robledo, consultor del despacho Cconfía Consultores, son muchos los errores que se pueden cometer en una empresa y que pueden generar el fracaso total del negocio.
De acuerdo con el Consejo Coordinador Empresarial el 75 por ciento de las empresas dejan de existir durante los primeros cinco años de vida y son muy pocas las que pueden dar el paso para convertirse en medianas, elemento que en otros países ha sido parte del progreso y de la generación de la riqueza.
Para Luis Carlos de la O existen muchos desaciertos, y depende también del giro de la firma, sin embargo se pueden citar siete claves.
VAMOS CON LA INERCIA
La primera clave es la falta de planeación. El empresario, va con la inercia de la operación, y nunca se toma el tiempo de planear. De elaborar un plan de acción para determinada temporada. Generalmente las contrataciones de personal se hacen en el momento, en el caso de los negocios que se dedican a vender, y se contrata conforme se vaya necesitando. Nunca se determina qué funciones va desempeñar el trabajador y mucho menos se fija un sueldo conforme a las actividades que desempeñe. De igual forma los gastos en las empresas se resuelven en la operación. Para Luis Carlos de la O, la falta de planeación determina en la mayor parte de los casos si una empresa tendrá éxito.
NOS COMUNICAMOS MAL
Otro desacierto que cuesta caro es el error en la comunicación. El problema no es la falta de comunicación, puede darse, desde luego, hoy estamos totalmente conectados, sin embargo, la comunicación no es efectiva, ni con los clientes, ni con los trabajadores y muchos menos con los proveedores, comenta el especialista. 'Parece irónico que estemos todo el día conectados por medios electrónicos y no precisemos bien un pedido a un proveedor y al momento de la operación, vienen los problemas', señala. Las promociones a los clientes hay veces que no son lo suficientemente claras y cuando llega la persona a realizar su compra se da cuenta de que el descuento o la promoción es diferente, esto va restando clientela y demanda por los productos y servicios. Por su parte, a un trabajador se le tiene que informar todas sus actividades dentro de la empresa, si va a estar en el mostrador se le tiene que señalar que tiene que limpiar el lugar de trabajo o bien atender el teléfono, de lo contrario, el trabajador promedio no realizará las funciones. Muchas veces por errores de comunicación una empresa no contesta el teléfono o tiene sucios los anaqueles. Luis Carlos de la O precisa que las actividades o los pedidos se deben hacer por escrito y con la mayor claridad posible, esto ayudaría a mejorar la comunicación oral en la empresa.
SI NO PAGAMOS IMPUESTOS NO SOMOS COMPETITIVOS
Para el también encargado en jefe de postgrado de la Facultad de Administración Fiscal y Financiera (FAFF) entre los empresarios existe mucho la idea y la confusión sobre la cuestión contable y fiscal. Comentó que sí están ligadas pero no es lo mismo. 'Hay la falsa creencia de que mientras menos impuesto se pague mejor y bajo ese contexto, la situación contable se vuelve poco precisa. Todas las empresas deben tener en orden su situación contable, es un error pensar que pagando menos impuesto se gana más. Recordemos que esto nos vuelve menos competitivos. El orden fiscal y contable no da claridad sobre lo que realmente estamos generando como empresa. Y esto nos permite crecer, ser más competitivos e incluso gozar de algunos beneficios.
EMPRESA Y FAMILIA SON SEPARADOS
Revolver las finanzas de la empresa con las familiares se vuelve de lo más común. 'Saca de la caja para pagar el gas o las colegiaturas de los niños' o 'manda a Juan para que arregle los aires de la casa, no importa que hoy no vaya a la empresa' o bien, 'mi primo se va hacer cargo de las finanzas aunque sea ingeniero químico'. Es cierto que la mayor parte de los negocios son empresas familiares, pero debemos tener en cuenta, señala que debe haber una separación, se deben determinar sueldos y darle claridad a las finanzas, además no se debe poner a los trabajadores a hacer labores del hogar y mucho menos contratar personal que no está apto para el puesto sólo por darle trabajo a un familiar.
NO SABEN DECIR NO
Hay otro error común entre los empresarios y es que no saben rechazar pedidos, aunque no se esté capacitado, y esto está más relacionado con empresas industriales o que se dedican a la elaboración de algún producto. Demos a conocer nuestra máxima capacidad para no quedar mal, más vale decir, no puedo y voy a trabajar por mejorar mi nivel de producción a prometer niveles que no podemos cumplir.
EL HOMBRE ORQUESTA
Un tema que va muy ligado a esto de saber decir que no es el ejemplo del empresario 'hombre orquesta', es un error típico del empresario 'que quiere hacer todo además de dirigir'. Este dueño de empresa dedica el tiempo a hacer cosas poco remunerativas. 'Siempre pongo el ejemplo de que un piloto no puede andar sirviendo si su función principal es pilotear'. El empresario debe aprender a delegar y escoger a las personas más aptas para realizar las diferentes funciones. Sin embargo, se dan los casos en que el empresario es bueno en la operación y de hecho en la operación depende el trabajo, 'se da mucho en estéticas, sastrerías o de comida' es este caso, el dueño debe tener la humildad para dejarle la dirección a una persona capacitada, aunque esté al pendiente del proceso.
VENDER POR VENDER
Finalmente y no menos importante, es que no saben fijar precios. 'El empresario busca vender a cualquier precio'. Generalmente el precio lo fija el mercado, sin embargo, existen otros factores que determinan el precio final. En este contexto, dice Luis Carlos, influye mucho la marca y la calidad. Si el producto es de calidad no tiene por qué malbaratarse sólo por venderse ya que esto genera pérdidas. Un paso que va muy ligado a los precios es el fortalecimiento de la marca. Si la marca está bien posicionada el producto se venderá solo. Sin embargo, son importantes los análisis de costos y la percepción del mercado.
LAS TRES ACCIONES
De la O Robledo señala tres acciones que se tiene que realizar en cinco semanas, una de ellas está relacionada con detectar cuáles errores tengo dentro de la organización y ubicar en qué parte se están generando. Después, tras conocer el foco rojo o amarillo se debe seleccionar un tipo de capacitación ya sea para el trabajador o para un empresario y finalmente impulsar algunas restricciones puede ser en sueldos o bien ampliar el número de trabajadores.
En estos 40 días debe apretar los gastos y no dejarse llevar por la amplia oferta de crédito, ya que muchas veces la solución está en mejorar la comunicación, en planear o bien fijar un mejor precio.
Y para los trabajadores
Como trabajador se tiene una responsabilidad dentro de la organización, por lo que estos son algunos de los errores más comunes y que llevan al despido o al fracaso:
Exceso de confianza en la memoria. Anotar las obligaciones diarias y actividades semanales puede ayudar a mejorar el desempeño.
Resistirse al cambio. En la era de la informática el trabajador debe estar preparado para cambios dentro de la organización y mostrar flexibilidad.
'Esto no es mi responsabilidad'. Como trabajador si se detecta algún error es importante comunicarlo aunque no esté dentro de su ámbito.
Evitar meterse en chismes de oficinas. Los chismes en la oficina retrasan los tiempos y además crean conflictos en la operación.
Quejarse de todo. Estar en una actitud negativa y con una queja constante por las labores que desempeña funciona negativamente al final.
Falta de orden en el lugar de trabajo. Un trabajador que siempre está lleno de carpetas y papeles, además del café y las galletas afecta el desempeño pues no tiene claridad en sus actividades.
Navegar por horas en las redes sociales. Ya sea en aparatos móviles o bien en la computadora de la oficina. Estar por horas poniendo 'me gusta' y viendo las fotografías de los amigos afecta el desempeño y retrasa los tiempos de entrega, además de que se vuelve una mala imagen
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