Fiesta. Miles de alemanes recorrieron el espacio donde antes se encontraba el Muro.
Cientos de miles de alemanes y visitantes confluyeron hoy en el corazón de Berlín para participar en los festejos populares, con el fin de conmemorar la Caída del Muro de Berlín el 9 de noviembre de 1989.
El buen clima contribuyó hoy a que la gente disfrutara el ánimo de la fiesta, que tiene como escenario el Centro de la ciudad, donde se encuentran la Puerta de Brandenburgo y el Reichstag, y por el que cruza el Río Spree. En sus bulevares pasea la muchedumbre.
Para marcar la línea donde se encontraba el Muro de Berlín se colocaron siete mil balones luminosos de color blanco en todo el trayecto.
Esos balones colocados a lo largo de 15 kilómetros serán soltados para que se eleven en forma simultánea, hoy domingo por la noche, para significar la desaparición del Muro, ocurrida ese 9 de noviembre.
La acción será el punto culminante de un gran festejo popular que se desarrollará en la Puerta de Brandenburgo, donde fueron alzados escenarios y enormes pantallas, donde la noche de ayer sábado actuaron lo cantantes favoritos de los alemanes, como Udo Lindenberg, con efectos de luz y sonido.
Ese emblemático monumento está a sólo dos cuadras del Río Spree, que está flanqueado por los balones luminosos porque en los años de la Guerra Fría fue una barrera mortal para quienes intentaron cruzar a nado de la orilla oriental y la occidental.
En el barandal del bulevar, a lo largo de ese río en el Centro de la capital alemana, frente al Reichstag, se alzan cruces de metal como recordatorio perenne de los alemanes orientales que ahí perdieron la vida.
La hora en que se soltarán los balones no es casual: Tendrá lugar a las 19:00 horas, cuando hace 25 años el político germanoriental, Günter Schabovski, en una conferencia de prensa televisada en Berlín Oriental, leyó el famoso comunicado de unas cuantas líneas que alguien le pasó por detrás, en el que se anunciaba la inmediata desaparición de la frontera entre las dos Alemanias.
Ese suceso ha seguido siendo un enigma en los 25 años transcurridos desde entonces, porque no se sabe quién le pasó el papel a Schabovski, o quién se lo mandó para que lo leyera en ese momento, ni por qué Schabovski creyó que era una orden de la cúpula política germanoriental.
En el festejo de hoy domingo participará Angela Merkel, quien es la primera figura política germanoriental que alcanza el puesto de ministra.