La nueva forma de gobernar
El gobernador Rubén Moreira, sistemáticamente se esfuerza en tratar de convencernos de que en Coahuila existe una “NUEVA FORMA DE GOBERNAR”.
Pero la constante mostrada, hasta ahora, por los gobernantes del PRI, tanto a nivel federal como local, es: la simulación, el maquillaje de cifras, la prostitución de conciencias, la violación de leyes, la ausencia de respeto por las instituciones, la nula transparencia y rendición de cuentas, así como la indigna subyugación del poder legislativo y judicial a los caprichos del Ejecutivo.
Sólo para el gobernador Moreira y sus subalternos todo mejora, sobre todo la seguridad, a pesar de que los índices delictivos y de violencia en delitos del fuero común se incrementan, de acuerdo con los datos publicados por diversos organismos, incluidos los oficiales, baste revisar los indicadores del INEGI, del Sistema Nacional de Seguridad Pública, incluso los de la Procuraduría General de Justicia del Estado.
Otra muestra, de que todo sucede o corre en sentido contrario a la percepción del ínclito Rubén Moreira, es la escasa, atomizada y focalizada inversión - casi exclusivamente en el ramo automotriz situada mayormente en Saltillo - el resto de Coahuila se cae a pedazos.
Exactamente igual, sucede con la inversión pública, baste decir que el programa de obra se reduce a bachear calles, así de triste.
¿Cómo anunciar una obra de impacto económico y social, si aun no terminan las abandonadas por la administración anterior? ¿Con qué recursos? si cada día aparecen más adeudos millonarios que se suman a los 36 mil millones que nos robaron, ejemplo inatacable, el de constructores y proveedores de todo el Estado.
En el aspecto social, en donde la pobreza y el desempleo corroe a las familias y deteriora su integración, los efectos de la mega deuda y las ineficientes administraciones de los Moreira Valdez, también a generado efectos negativos: ya no hay uniformes de la gente, ya no hay zapatos de la gente, ya no hay cuadernos de la gente, ya no existe el monedero de la gente, y claro, no hay empleo.
A nivel municipal, la situación no es diferente. En la actual administración de Torreón, Miguel Ángel Riquelme, tiene por estrategia golpear a todo aquel que ose criticar su administración, así se lo hizo saber a los líderes de opinión, a los colonos de Torreón Jardín, a las ONGs y cámaras que no comparten su visión.
Una muestra más de que los políticos del PRI no cambian son: la concesión de alumbrado publico a la empresa Construlita Lighting International y el arrendamiento de vehículos a la empresa Adquisición Vehicular Asesorada, SA de CV, casualmente el proceso de adjudicación para ambas fue directo. Lo que muestra que la simulación, la falta de transparencia y la violación a la ley siguen siendo prioridad para los “gobernantes” emanados del PRI.
Todo lo anterior es de conocimiento público, no es nuevo, es el resultado del esfuerzo diario que realizan los pseudo servidores públicos en donde los hechos se contraponen con su retórica barata. Así de incongruentes son Rubén y Riquelme.
Lastima que por la apatía e inconsciencia de la mayoría de los ciudadanos, que se quejan, pero no ejercen sus derechos, legitiman con su actitud, los delitos y atrocidades que cometen los “gobernantes” en turno.
Jesús Gerardo Puentes Balderas.
Torreón Coahuila
