IFE, derecho al voto
Ante la inseguridad y falta de oportunidades para los profesionistas jóvenes, me vi obligada a abandonar mi ciudad natal de Torreón, Coahuila, y actualmente resido en Buenos Aires, Argentina.
Con motivo de las fiestas navideñas regresé a México y me di cuenta que no progresa, por el contrario continúa el retroceso. con servidores públicos carentes de honradez moral e intelectual.
Al llegar al aeropuerto de la ciudad de México me entregaron el instructivo “Bienvenido a casa paisano”, en el que se me hacía saber que la credencial de elector podía ser obtenida o renovada en un plazo de 48 horas.
Cuando acudí al módulo del IFE correspondiente a efectuar mi trámite de renovación, me registré como residente en el extranjero por lo cual deberían tramitarlo en el plazo de 48 horas señalado en el programa “Bienvenido a casa paisano”; sin embargo la persona del sexo femenino que me atendió, quien se negó a proporcionarme su nombre, al final del trámite me señaló que no era posible que se me entregara la credencial de elector en el plazo de 48 horas. procedí a tratar de entrevistarme con su superior jerárquico en dos ocasiones a horas hábiles y nunca estuvo disponible.
Por ello, recurrí por la vía telefónica a presentar una queja en Ifetel donde quien me atendió dijo desconocer el ofrecimiento del programa bienvenido paisano, por lo que no podía hacer nada por mí.
Lo anterior, no sólo pone de manifiesto la ineficiencia de los servidores públicos en mi México querido, sino también la falta de cultura para la observancia de los derechos humanos de fuente nacional e internacional, pues los servidores públicos del IFE me están impidiendo el ejercicio de mi derecho humano al voto, por lo que al comparar con el país donde resido y a los que viajo con motivo de mi trabajo me doy cuenta de que México no atiende a los principios de progresividad. Ya no puedo hacer nada por recuperar mi credencial porque me informan que las oficinas estarán cerradas hasta mi retorno a Argentina.
Lorena Sánchez,
Buenos Aires, Argentina.
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No es lamento... es ayuda para ver lo que no ven
Dejarse de lamentos... dice Sr. Riquelme: y tiene razón. Ahora habrá que pasar al reclamo formal y puntual de las cosas mínimas... haber si con eso pueden. Mes a mes voy al Simas a pagar mi recibo de consumo, y mes a mes me encuentro con los espacios de la entrada sucios y malolientes, dan vergüenza ajena. Y bueno si las cosas están así por dentro, las cosas por fuera no pueden ser diferentes.
El jueves 2 por la mañana estaban regando el remedo de jardinera que tienen con una llave a chorro abierto, y además, después de recibirme el dinero la cajera sólo me selló el recibo; le pregunté si no me daría contrarrecibo oficial y me dijo que no, que así van a operar ahora. Intenté pasar a hablar con un funcionario y no me dejaron, que tenía que hacerlo desde un teléfono, al que varias personas estaban esperando. ¿Esta es la Nueva Modalidad? ¿El consejero Sr. Félix seguirá cobrando por sus consejos? ¿Habrá presupuesto por lo menos para una escoba y un trapo para limpiar?. Digo, si no hay visión, buena administración y voluntad...por lo menos que atiendan un poco la limpieza física de las banquetas. ¿Podrán con esto?, ya veremos. Y no es lamento, es ayuda y cooperación para que vean lo que ellos no ven.
Gerardo Ibarra Solís,
Torreón, Coahuila.
