En el aborto no hay colisión de derechos
Con cierta frecuencia se plantean conflictos entre derechos personales, cuya solución exige finas cirugías jurídicas en las que se pondere los derechos en juego.
Así, por ejemplo, puede colisionar el derecho de un periodista a expresarse o a informar sobre alguien con el derecho de ese ciudadano a que se respete su vida privada (de hecho, los tribunales están acostumbrados a ponderar tales derechos, en aras de un justo equilibrio): pero el caso es que en el aborto no se da esa colisión de derechos. Sencillamente porque la libertad de la madre no comprende el derecho a destruir una vida distinta a la suya (permanezca o no en sus entrañas): luego, no se da una verdadera colisión de derechos que implique una ponderación, salvo que la vida del uno colisione con la vida del otro.
Jesús D Mez Madrid
Girona, España
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Doctor, usted tranquilo’
Muy joven, de sólo 13 años de edad, toreó su primera novillada en un festival, dos años después se presentó como novillero, el chamaco muy pronto comenzó a llamar la atención, los aficionados siempre hambrientos de nuevas figuras lo acogieron con premura, y es que aparte de su buena presencia, era valiente, muy plantado en la arena, sus lances transmitían esa emoción que se siente en el estómago, tenía eso que los gitanos llaman “el duende”.
A los veinte años de edad se doctoró como matador, recibió la alternativa del maestro Paco Camino, como torero siguió triunfando y, desde luego, disfrutando de las mieles de su éxito, y luego se casó, nada es para siempre, su esposa muy guapa mujer, Carmen Ordóñez, hija del legendario matador Antonio Ordóñez, un matrimonio feliz que sólo duró siete años, procrearon dos hijos, y como desgraciadamente sucede cada vez más a menudo, una pareja que parecía perfecta, se separaron.
Poco tiempo después conoce a Isabel Pantoja y, como la mayoría de todos los españoles, se enamora de ella, Isabel Pantoja hija de un guitarrista y una bailaora de flamenco, preciosa mujer, que a sus veinte años ya era una cantante famosa, que me perdonen los gitanos, para mí también tenía “el duende” (les recomiendo su video cantando “Así fue” de Juan Gabriel, es un verdadero deleite, para la vista y para el oído).
Las páginas del corazón de los periódicos y de las revistas los convirtieron en sus favoritos, el plebeyo que se hizo rey se casó con la plebeya que se hizo reina.
“Manolo, en Pozo Blanco es la última corrida” le preguntó a su apoderado, él se refería a la última corrida de la temporada, desde entonces nadie en España, se dedique a lo que se dedique, dice que es lo último que va a hacer en el día, la semana o el año.
“Doctor, yo quiero decirle algo, la cornada es fuerte, al menos tiene dos trayectorias, una para acá y otra para allá, usted abra lo que tenga que abrir, y usted tranquilo doctor”.
Fueron sus últimas palabras, el doctor nervioso observaba el muslo del torero convertido en una fuente de sangre, el toro “Avispado”, con la cornada le había partido la iliaca, la femoral y la safena.
Francisco Rivera “Paquirri” falleció en la ambulancia cuando era trasladado de la Plaza de Pozo Blanco a un hospital de Córdova, dejó a su viuda Isabel Pantoja con un niño de siete meses de edad. Al día siguiente Isabel Pantoja fue bautizada como la Viuda de España.
Roberto Barranco Aguilar
Torreón, Coahuila.