Estudios indican que los genes determinan las amistades humanas. (ARCHIVO)
El elegir a los amigos podría ser un asunto más relacionada con la genética que con el hecho de compartir gustos con esas personas.
En un informe publicado por las Actas de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos (PNAS), los amigos comparten algunos genes que determinan que dos o más personas se sientan bien al convivir entre ellas.
Los genes similares entre unos y otros ayudan en la convivencia y a formar lazos de amistad o con la pareja amorosa.
“Tenemos más ADN en común con la gente que escogemos como amigos que con los extraños de la misma población. En promedio, somos genéticamente similares a nuestros amigos”, deduce el portal ABC.es en un artículo publicado referente al tema.
Investigaciones llevadas a cabo en la universidades de Yale y California, encontraron que los seres humanos a diferencia de otros animales, pese a no compartir rasgos biológicos sí eligen a sus compañeros de acuerdo a similitudes genéticas.
De esta forma los estudiosos deducen que los gustos y aficiones no son una causa de unión entre amigos, sino una consecuencia del parentesco de sus genes que provoca que finalmente entre amigos existan placeres idénticos.
