Protagónico. Denzel Washington participó en El justiciero.
En Ferguson, Estados Unidos, las protestas crecen por la decisión de dejar en libertad al policía blanco Darren Wilson, que estaba acusado de matar a un joven negro. Tanto el asesinato como la absolución son considerados por los protestantes como acto de racismo.
Pero mientras en las calles la comunidad afroamericana se manifiesta, en Hollywood las cosas parecen distintas. Ahí, tierra de sueños al fin, los afroamericanos cada vez adquieren mayor poder.
Los días en que tenían papeles de sirvientes, trabajadores o asesinos han quedado atrás.
Este avance que comenzó luego de que en 2002 Halle Berry ganara el Oscar a Mejor Actriz por su interpretación en Monster Ball.
Este auge se refrenda con los filmes estrenados en los últimos años y algunas más que están por lanzarse y que son protagonizados por esta comunidad que hace años era segregada.
Varias películas son remakes, que en su primera versión fueron interpretados por actores blancos.
Tal es el caso de próximos estrenos como Annie (Anita la huerfanita) que buscará darle un giro a la historia para captar así un mayor ingreso en taquilla que sus predecesoras.
Este año no es el único caso, ya que los mismo ocurrió con Hércules, cuya versión con Dawyne Johnson ganó 254 millones de dólares en comparación con la protagonizada por el rubio Kelan Lutz, que captó sólo 96 mdd.
"Los cambios son por una cuestión política y económica", comentó Gerardo Gil Ballesteros, crítico cinematográfico y académico.
Lo mismo que Hércules, sucedió con El justiciero, estelarizadas por Dawyne Johnson y Denzel Washington, respectivamente. Estos filmes en conjunto recaudaron 436 millones de dólares alrededor del mundo. Cada una ganó casi tres dólares por cada uno invertido.
Gil Ballesteros, experto de ABC Radio y profesor en Cinespacio 24 es, sin embargo, menos optimista respecto a los alcances de esta moda: "En realidad no ha habido ningún cambio de fondo, de cómo Hollywood ve a la comunidad negra. Los que van a interpretar son personajes blancos en su sicología. Por ejemplo, habrá que ver a la Antorcha, pero el original del cómic es un rubio millonario, y no creo que eso cambie; Hércules finalmente es un clásico, eso no se modifica y pues la comunidad negra es un sector económico muy fuerte, no puede olvidarse".
LOS CAMBIOS
Una de las cosas por las que el público recordaba a la niña Annie (Anita la huerfanita, en México) en teatro y cine era por ser pelirroja y por sus claras pecas y rizos.
Por ello, cuando se anunció que Quvenzhané Wallis, la actriz más pequeña en obtener una nominación al Óscar por Una niña maravillosa, sería protagonista del filme, hubo revuelo.
A ella se sumó un elenco de "black power" compuesto de Jamie Foxx (Ray) y el rapero Jay-Z Cameron, quien será el encargado de reversionar los clásicos de la puesta en escena.
"De esa película será interesante ver qué hacen, cómo la adaptan, siendo una historia ya muy conocida", comenta Gil Ballesteros.
Otro caso es el de la película de los 80 Karate Kid, protagonizada por Ralph Machio y que en 2010 fue nuevamente llevada a la pantalla grande por el hijo de Will Smith, Jaden. Pese a las críticas encontradas, logró generar mayores ingresos que la original.
De los actores afroamericanos con cartel protagónico desde hace años, además de Denzel Washington, se encuentra el propio Will Smith, estelar en películas como Hombres de negro y Día de la independencia.
Una entrevista publicada por medios estadounidenses hace seis años, reveló que cuando decidió ser actor buscó qué historias eran exitosas y se dio cuenta que eran las poseedoras de un héroe y las de ciencia ficción.
Los16 de sus 20 filmes han recaudado ganancias por más de 100 millones de dólares en el mundo. Y la revista Forbes lo ubica como uno de los actores más rentables de Hollywood. Gil analiza el éxito de Smith: "En busca de la felicidad es la única que alude a malas condiciones de negros, donde al final, el sistema americano lo respalda por ser un personaje que sufre y se recupera".
Contra el racismo en México
En México el tema del racismo hacia la raza negra se tocó en Angelitos negros, la cual ha tenido dos versiones: 1948 y 1969.
La primera fue protagonizada por Pedro Infante. En ella una mujer rubia trataba mal a su nana negra, que al final sabría que es su mamá, y daría luz a una bebé de ese color.
Ambos filmes son la versión mexicana de la famosa novela de Fannie Hurst Imitación a la vida, que también fue adaptada en otras dos conocidas películas de Douglas Sirk y John M.Stahl. Para el crítico de cine Gil Ballesteros la importancia de los largometrajes radica en lo fuerte de la temática para la época que se vivía en México en aquellos años. "Tiene diálogos tremendos, duros, ahora sería impensable presentar así algo, creo habría muchos reclamos, era una historia acorde a su época", destaca Gil Ballesteros.