EL TEMA de hoy viene a colación con motivo de las exigencias que la semana pasada quiso hacer valer Participación Ciudadana 29 (PC29) al alcalde Miguel Ángel Riquelme, a fin de que les respetaran un contrato de prestación de servicios profesionales que aquélla había logrado obtener con Eduardo Olmos por un valor de $1'→ 500,000.00 pesos y en favor de Capacitación Fiscal A.C.
EL CONTRATO fue gestionado por los señores Ricardo Segura Montaña y Rafael Saavedra Urbina dirigentes de la propia Asociación y tenía como objetivo la práctica de una auditoría a Simas por los ejercicios de 2010 a 2014.
A raíz de ese contrato, lograron obtener de la Tesorería municipal un anticipo de $535,920.00 pesos al amparo de la factura número 4301 de fecha 11 de diciembre de 2013, que representaba el 30 por ciento de sobre un contrato millonario de $1'400,000.00 pesos. La factura fue expedida por Fisco Capacitación S.A. quien dijo estar domiciliada en Calle Cepeda Sur esquina con Av. Morelos (por cierto un domicilio difícil de precisar físicamente).
PERO ESTO SERÍA lo de menos, el contrato de referencia se otorgó a una sociedad civil que no está registrada como proveedora de Simas ni del Municipio de Torreón; el contrato no fue sujeto a una licitación pública como lo exige la ley ya que se adjudicó de manera directa; la sociedad adjudicataria fue propuesta por los mismos señores Rafael Saavedra Uribe y Ricardo Segura. Como se ve, existían también varias y graves irregularidades jurídicas, entre otras, una fiscalmente importante como es saber si se retuvo el Impuesto sobre la Renta y el IVA a la empresa que recibió el anticipo. Como se podrá ver las irregularidades jurídicas son varias y relevantes; pero aún lo son más, las éticas y las morales.
ES UNA DESGRACIA, pero así lo es, que algunas personas hayan encontrado a estas fechas un cómodo y fácil modus vivendi. Así, de manera espontánea y manipulando los medios se erigen y constituyen como los adalides, defensores prístinos e impolutos de la sociedad.
Aparecen simulando ser los más fieros y alertas en la transparencia y rendimiento de cuentas y los más aguerridas luchadores en contra de la corrupción; sin embargo, algunos de ellos (muy pocos por fortuna) son verdaderos itinerantes perpetuos que con recibo en mano con varios ceros, que recorren las oficinas de gobierno en busca de que alguien les compre su silencio.
Se sabe que en la PC29 hay muchos elementos valiosos y luchadores sociales acreditados, lo que sí no parece haber son dirigentes a la altura de los objetivos que se buscan. Ello es una lástima, pues ese tipo de conductas afecta de manera indirecta y negativa a otras organizaciones que sí están haciendo bien su trabajo.
EN ESTE CASO lo menos que debería hacer el Ayuntamiento de Torreón, sería obligar a los que obtuvieron indebidamente y al margen de las leyes, interponerles una demanda civil para reclamarles a los señores Ricardo Segura y Rafael Saavedra o a Fisco Capacitación A.C., la devolución de los $535,920.00 pesos como consecuencia de un pago de lo indebido, una figura jurídica prevista en la ley.
PASANDO A OTRO TEMA, se nos pone nuevamente de manifiesto el nivel de algunos los legisladores a los que diariamente les pagamos sus sueldos y canonjías como causantes del fisco. Se trata de la senadora perredista por Michoacán, Iris Vianey Mendoza, quien se publicitó bailando con Melissa Plancarte (La Barbie) hija de uno de los hombres más buscados en el país, y por quien la PGR ofrece 30 millones de pesos de recompensa. Quizá la misma senadora Iris Vaney Mendoza podría cobrar la jugosa recompensa.
PERO ESE no ha sido el único escándalo entre legisladores. También hace unos días salió el asunto del "Moche de los Panistas" que exhibió a los legisladores panistas como transas.
Las cosas no acaban ahí, ahora asoma otro escándalo, pero a cargo de un senador panista, que para acabarla de amolar es el líder de la bancada azul en el Senado: se trata nada más y nada menos que del oscurísimo Jorge Luis Preciado impuesto por el propio Gustavo Madero como pastor de los azules cuando destronó a Ernesto Cordero de ese cargo.
ESTE OSCURÍSIMO PERSONAJE se tomó la libertad de organizar terrible pachangón en las mismísimas instalaciones del Senado de la República en honor de su esposa que cumplía años (como dicen los Nobles de la película: ¡Ya llegamos vieja!) Y tal y como se tratara de uno de esos salones de fiestas que se rentan para festejos de XV años y bodas, el azul bailó borracho haciendo cabriolas flamencas con un vaso de alcohol en la mano y un gran puro en la boca (se debió haber sentido un auténtico cordobés ¡joder!)
DÍGAME USTED ¿quién les ha dado permiso a estos truhanes para convertir un edificio público recinto de unos de los tres poderes de la nación, en salón de fiestas privado para organizar sus jolgorios familiares y convertirlo en canti'na pletórica de borrachos festejantes?
¿PUEDEN USTEDES imaginar en los salones del Capitolio en la Ciudad de Washington D.C. un pachangón con senadores norteamericanos bien etílicos y bailando casi hasta caer?
PUES NO, ¿VERDAD?
Y DESPUÉS SE quejan de que el Senado y la Cámara de Diputados sean una de las entidades públicas más desacreditadas y poco confiables en la percepción de los mexicanos. Finalmente no tiene la culpa el indio, sino quien lo hizo compadre.
