Meta. Los nuevos impuestos que trae la reforma fiscal en 2014 a bebidas y otros productos no permitirán tener una inflación del 3%.
La inflación será el primer indicador macroeconómico que reflejará los efectos de la entrada en vigor de la Reforma Hacendaria, incluso se anticipara que rebasará el objetivo del Banco de México (Banxico) de 3%, más-menos un punto porcentual, revelaron analistas.
El jueves, el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi) dará a conocer la variación del índice nacional de precios al consumidor en la primera quincena del año, que de acuerdo con el consenso de especialistas, podría situarse entre 4.5% y 4.7%.
Expertos señalan que el dato revelará el impacto de los cambios fiscales (IVA en frontera, IEPS en bebidas azucaradas y alimentos con alto contenido calórico, principalmente), así como el incremento en los precios de bienes y servicios administrados por el gobierno (gasolina, o en algunos casos locales, el transporte).
El director para América Latina de Moody's Analytics, Alfredo Coutiño, dijo que estos impactos podrían impulsar a la inflación a tasas cercanas a 5% en los primeros meses del año.
Aunque las autoridades esperan que el efecto inflacionario que causarán las medidas impositivas será transitorio, el directivo explicó que de persistir este fenómeno por más tiempo, el banco central se vería forzado a normalizar las condiciones monetarias hacia una posición más neutral o incluso restrictiva, lo cual podría suceder en la segunda mitad de 2014.
