En reacción a botepronto tras la resolución de la juez del concurso mercantil de Mexicana de Aviación, Edith Alarcón, de declarar en quiebra a ésta y sus filiales Click y Link, la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación inició un análisis sobre la conveniencia de impugnar.
La posibilidad de éxito sería remota, dado que el procedimiento de búsqueda de alternativas para reestructurar la deuda de la línea aérea se prolongó al infinito. La Ley habla de un año natural, y el camino se había alargado tres años siete meses.
La tenue rendija por la que se buscaría colar el recurso es el que la togada haya soslayado, a título de carecer de personalidad, la existencia de un postor de último minuto para intentar el rescate de la empresa.
La alternativa número 35 la representaba el grupo William Capital, que aseguraba tener disponibles 600 millones de dólares, el doble de lo solicitado como mínimo, para inyectarlos a la aerolínea.
La esperanza de los trabajadores se había abierto al ofrecer el interesado liquidarlos de inmediato… para recontratar a mil 100 en la primera fase de despegue de la línea aérea.
La distancia entre el dicho y el hecho era que el inversionista exigía incluir en el paquete a la firma de mantenimiento MRO, el único negocio en marcha tras la solitud del procedimiento por parte de la compañía, colocada en agosto de 2010.
El problema, naturalmente, es que al momento de plantearse la oferta se había aceptado ya la opción para liberar del concurso mercantil a ésta, es decir su capitalización con mil 300 millones de pesos a cambio de las acciones, por parte de los acreedores de Mexicana, el Banco Mercantil del Norte (Banorte), el Banco Nacional de Comercio Exterior y el Aeropuerto Benito Juárez de la ciudad de México.
La posibilidad del convenio de reestructura la obstaculizaba la Tenedora K, la oscura firma que adquirió en mil pesos 95% de las acciones del Nuevo Grupo Aeroportuario, la tenedora de Mexicana, Click, Link… y MRO.
El representante de la empresa exigía 25 millones de dólares por firmar, según ello para resarcirse de lo invertido en las escasas dos semanas que mantuvo en operación a la línea aérea luego de la graciosa huida de su dueño, Gastón Azcárraga Andrade.
La sospecha apuntó siempre a que la firma representada por Jorge Gastelum era prestanombres de éste… con la idea, justo, de quedarse con el taller de mantenimiento, cuyos diplomas lo acreditan como altamente confiable para cualquier línea aérea nacional o internacional.
Lo cierto es que el margen de si prospera o no la impugnación, los sindicatos de Mexicana deberán estar atentos a las acciones del síndico liquidador para integrar a la masa de la quiebra el mayor número de activos tangibles e intangibles.
Estamos hablando desde la posibilidad de que alguien quiera rescatar la marca, hasta las licencias para vuelos internacionales que están aprovechando firmas como Interjet y Volaris.
De acuerdo a los estándares de certificación de los Estados Unidos, para adquirir la autorización de un vuelo internacional se reclama, entre otras cosas, que la empresa solicitante tenga 15 años de experiencia.
Ninguna de las compañías señaladas cumplía el requisito.
De hecho, durante la gestión de Juan Molinar Horcasitas como secretario de Comunicaciones y Transportes se intentó estérilmente que se soslayara el punto para las líneas aéreas de bajo costo recién creadas.
En la misma ruta, la empresa podría reclamar el cuantioso fondo laboral, que desapareció a la salida de Azcárraga Andrade.
En el mismo marco habría que analizar si en un eventual juicio se le obligaría a éste a reintegrar a la caja de la empresa el dinero que desvió para compra de acciones del grupo hotelero Posadas, del que era también presidente.
En la vía que apunta al de-lo-perdido-lo-que-aparezca, habría que indagar que fue del fondo específico para financiar la jubilación de los trabajadores, integrada la cuenta en un fideicomiso bancario.
Por lo pronto, la movilización de los damnificados que mantenían en la tenue luz de una veladora la esperanza del regreso a las pistas, será de escándalo.
BALANCE GENERAL
Aunque su director general, Javier Arrigunaga, insiste en que el escándalo de la empresa Oceanografía no le ha causado más que algún rasguño a Banamex, lo cierto es que las empresas calificadoras de deuda empiezan a reaccionar.
Una de ellas, Moody's, acaba de señalar que el fraude de 400 millones de dólares al segundo banco del país podría afectar su capacidad para mantener una sólida capitalización y expandir sus negocios cuando mejore el entorno económico del país.
De acuerdo a la calificadora de Estados Unidos, el caso desnuda una falta en los controles y funciones de auditoría, así como diferencias en la gestión y medición de riesgo, de cara a una de las exposiciones más grandes del banco.
Y más: "La situación incrementa el riesgo de que el banco enfrente cargos adicionales a sus ingresos, que puedan afectar sus capacidades para mantener una sólida capitalización y aumentar el volumen de sus negocios".
HOMEX YA CASI
De concretarse los créditos por 2 mil 100 millones de pesos, que negocia con una filial del Fondo de Oportunidades de Crédito Zell, la desarrolladora de vivienda Homex estaría en posibilidad de reiniciar la ruta sin sortear un concurso mercantil o procedimiento de quiebra ordenado.
Los préstamos se pactarían a tres años, con opción de extender el plazo de amortización hasta en dos ocasiones.
El problema sería el monto de los réditos que se le impondrían a la firma de la familia De Nicolás de cara a su escasa posibilidad de financiamiento con instituciones bancarias nacionales.
Al estallido de la crisis provocada por el cambio abrupto de reglas para construcción de viviendas media y de interés social, Homex vendió los contratos que tenía para construir dos penales de alta seguridad.
La empresa ha despedido a 80% de su personal.
HERDEZ SE REFUERZA
En su próxima asamblea general ordinaria a desahogarse el 24 del mes que corre, el Grupo Herdez ratificará como presidente a Héctor Hernández-Pons, integrándose a seis connotados empresarios al Consejo de Administración en calidad de independientes.
Estamos hablando, entre otros, del exdirector general del banco IXE, Enrique Castillo Sánchez Mejorada; del exdirector general de Casa Autrey, Carlos Autrey Maza y del expresidente de los desaparecidos Sidek y Situr, Luis Rebollar Corona.
FRENAN FALLO
A contrapelo de la ruta crítica prevista, no hay aún fallo sobre la licitación para una póliza de seguros de daños de las Administradoras Portuarias Integrales. El anuncio estaba previsto para el martes de la semana pasada.
Las señales indican que el retraso se debe a maniobras del despacho Iturria, quien actúa como asesor de las propias Apis, para favorecer a una empresa de su preferencia.
La previsión podría plantear la cancelación del concurso o declararlo como desierto.
La propuesta más atractiva la presentó Axa Seguros, seguida de GNP, Inbursa e Interacciones.
SIMPOSIO EN ACATLÁN
Esta mañana en las instalaciones de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán de la UNAM se inaugura un simposio para analizar las entrañas del gobierno. El nombre es emblemático: "Sector Público, un sistema complejo".
Albertobarrancochavarria0@gmail.com
