Desconfianza. Los alcaldes del país no ven con buenos ojos las propuestas del Presidente para abatir la inseguridad.
La Asociación Nacional de Alcaldes (ANAC) expresa su preocupación por la reciente iniciativa presidencial de reformas constitucionales en materia de seguridad, dado que su enfoque es centralista.
Particularmente en el retiro de la función de policía preventiva y la potencial invasión a su autonomía pretextando casos de infiltración del crimen organizado; sobre todo cuando la infiltración no acecha solamente a municipios sino que también toca gravemente a instituciones de otros órdenes de gobierno.
"Es un hecho que en la gran mayoría de los casos, los municipios estamos trabajando en depurar y certificar a nuestros policías, fortaleciendo el tejido social".
"La gran diversidad de tamaño y condiciones socio políticas de los municipios obliga más que a quitarles funciones, a fortalecer sus capacidades institucionales", asentó la ANAC en un comunicado.
La organización panista sostuvo que la asunción del mando de una policía municipal por otro orden de gobierno, ya está previsto en la fracción VII del artículo 115 y en todo caso estamos a favor de reglamentarla. Asumir el mando operativo policial, no significa asumir la administración y función total, dijo.
"Reconocemos que como en todo modelo de federalismo cooperativo, debemos crear mecanismos 'excepcionales' para que un orden de gobierno sustituya al otro en la función total seguridad pública, dados determinados requisitos. Sin embargo, la excepción no debe constituir regla", añadió.
Por lo anterior la ANAC afirmó que la iniciativa afectará gravemente la calidad de vida ciudadana y la gobernabilidad municipal, al restarle al municipio de manera general la función policial y con ello de fuerza pública, pues la coacción de los ordenamientos municipales se volvería prácticamente imposible o nula.
