Guardia. Activistas prorrusos permanecen en guardia en un puesto de control cerca de la ciudad de Slaviansk, Ucrania.
Un grupo de soldados de la Guardia Nacional de Ucrania ha cambiado de bando y ha jurado lealtad a los rebeldes prorrusos en la región de Donetsk, reconoció este cuerpo militar ucraniano creado tras el derrocamiento del presidente Víktor Yanukóvich.
La deserción, investigada por la Fiscalía general de Ucrania, tuvo lugar el viernes cuando un grupo de 130 insurgentes prorrusos armados rodearon y hostigaron el cuartel general de la Guardia Nacional en Donetsk.
"Debido a la traición de un grupo de soldados profesionales, que juraron lealtad a la (autoproclamada) república popular de Donetsk, y para no permitir el derramamiento de sangre, los mandos de la Guardia Nacional decidieron replegar a sus efectivos, junto con las armas" y blindados a otro cuartel, señala un comunicado del cuerpo militar.
La comandancia de la Guardia Nacional desmintió que los insurgentes se hubieran apoderado de 200 fusiles automáticos, aunque reconoció la desaparición de varias pistolas.
Por otra parte, el llamado "Ejército Unido del Sureste", brazo armado de la autoproclamada república popular de Lugansk, se unió a sus vecinos prorrusos de Donetsk en su exigencia a las tropas y fuerzas de seguridad ucranianas para que se retiren de la región.
"Nosotros, el Ejército del Sureste, nos dirigimos a todos los que han venido a nuestra tierra para hacer la guerra: Soldados de las Fuerzas Armadas de Ucrania, la Guardia Nacional, miembros del Pravi Sektor (Sector de Derechas)".