Columnas Deportes Columnas Deportes Editorial

La Columna de Rosell

Rafael Rosell

Toca "viernes de exorcismo" le diría el viejo Merrin al joven aprendiz Karras, sólo que esta vez el demonio se presenta en dos lugares al mismo tiempo, sí, la ominosa presencia del ángel caído amenaza con corromper los corazones laguneros, el objetivo del Diablo era eliminar a los Vaqueros y alargar la agonía de los aficionados guerreros de no ser testigos de una victoria en casa.

La encomienda no era fácil, el veterano exorcista Lankester Merrin eligió el lugar más complicado como corresponde a sus pergaminos, un escenario viejo lleno de historias y misterios, el Estadio de la Revolución. La misión del arqueólogo padre: evitar la aniquilación de los Vaqueros Laguna a manos de una legión de demonios llegada del imperio. El novato Damien Karras es enviado a un escenario menos complicado pero no por eso la jornada resultará fácil, aun así el padre Karras se prepara para todo y sin pensarlo, biblia en mano y rosario en la otra, asesta conjuros letales a la bestia, Rentería anota ¡a los doce segundos! Karras no se confía y sigue encomendando al indeseable a retirarse derrotado del TSM, Orozco a los cinco minutos hiere de muerte al maligno, nadie, ni el propio padre Karras se imaginó que la jornada resultara tan fácil, misión cumplida el Diablo se retira caído y humillado del Estadio Corona.

Karras satisfecho por el éxito de su misión, está a punto de sonreír pero recuerda a su viejo maestro, le han llegado noticias del Revolución, ahí se lleva a cabo una lucha formidable entre el bien y el mal, el anciano Merrin combate con lo último que le queda de vida al tentador de hombres, siete carreras a tres pierden los Vaqueros en el cierre de la cuarta entrada, causa perdida sin duda. Karras siente que debe de ir de inmediato a asistir a su maestro, pero las instrucciones del veterano exorcista fueran precisas, pase lo que pase la faena debe de realizarla el mismo, sin ayuda.

Nos trasladamos al Estadio Revolución las tribunas atestadas de gente de buena fe observan con angustia cómo la bestia está ganando la batalla, los Diablos Rojos ya se encaminan veleidosos a la final de la Zona Norte, pero... un momento... el anciano Merrin aparentemente noqueado se levanta y exclama con potente voz "¡vade retro!" (¡apártate satanás!), el demonio desconcertado observa cómo Francisco "Chipper" Méndez, como un arcángel, armado no con una espada flamígera sino con un bat de madera conecta no uno ni dos, ¡sino tres cuadrangulares!, y empuja siete carreras aprovechando que el demonio se encuentra inmovilizado por los conjuros del padre Merrin, con el último aliento el anciano sacerdote levanta la cruz y Tony Peña júnior obliga a Iván Terrazas a rodar a la segunda base, ¡out 27!, se acabó, los Diablos también fueron vencidos en el Revolución, misión cumplida, dos exorcismos al mismo tiempo, un éxito monumental del bien. Karras llega por fin al viejo parque de pelota y se da cuenta del estado lastimoso de su maestro, pero Merrin le sonríe, está agotado hasta el desmayo pero bien, Karras ayuda a Merrin a sacudirse el polvo de la batalla, entonces los sacerdotes se abrazan y se van caminando rumbo al Bosque Venustiano Carranza para en comunión con la naturaleza rezar en agradecimiento a Dios por la encomienda cumplida.

rrosell50@hotmail.com

Leer más de Columnas Deportes

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Columnas Deportes

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 1030006

elsiglo.mx