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La Columna de Rosell

Rafael Rosell

A tres juegos para llegar al break del Juego de las Estrellas en la Liga Mexicana de Beisbol, nuestro representante de La Laguna (para los despistados existe otro equipo profesional en nuestra Comarca), Vaqueros, navega otra vez en los últimos lugares de la Zona Norte, en eso no hay cambio, de acuerdo, pero esta vez sucede algo inédito y que nos hace tener legítimas esperanzas de al menos tener un juego de comodín. Recordemos, si el cuarto lugar de la zona no le saca al menos cuatro juegos de ventaja al quinto habrá juego de comodín, el hecho inesperado es que ahora los naranjas tienen pitcheo, sí, los laguneros están entre los mejores cuerpos de pitcheo de la Zona Norte y poseen algunas joyitas jóvenes en su roster de abridores.

Destaca el chavo que va a cumplir 18 años el próximo agosto, Luis Iván Rodríguez, este jovenzuelo de Guadalajara, Jalisco, tiene una marca de 3-0 y un más que decente 3.02 de efectividad, como dirían los cursis novelistas, "a su tierna edad" más allá de sus números ha demostrado un temple digno de un veterano establecido en la Liga. En su última salida, el pasado viernes en Monclova contra el líder de toda la Liga, Acereros, fue sacudido con cuatro carreras en el cierre de la primera, incluido un homerun de tres carreras, lejos de caerse colgó cinco ceros consecutivos contra la ofensivo número cuatro de la competencia, retirando en orden a los diez últimos que enfrentó.

El chavito está llamando la atención poderosamente y ya es observado por decenas de buscadores cada vez que sube al montículo. Tendrá que mantenerse incólume y resistir las embestidas de esa veleidosa y traicionera señora que es la fama.

Otra sólida esperanza para convertirse en estrella de la Liga Mexicana de Beisbol es Óscar Félix, de Navojoa, el zurdo fue la primera selección del Draft de la Liga Mexicana del Pacífico en 2013 y se espera para la segunda parte de la temporada reciba más oportunidades de abrir juegos, hasta el momento tiene dos aperturas en 19 apariciones, la forma en que lo está llevando Lino Rivera, timonel Vaquero, parece la indicada.

En cuanto a la experiencia, dos abridores sólidos son: Salvador Valdez 5-4 y 2.84, y Claudio Vargas 2-2 y 3.72. Un buen relevo intermedio es Iván Zavala y para cerrar Tony Peña júnior, un parador corto que se convirtió en un letal taponero.

La ofensiva lagunera que termina la mayoría de las veces entre las primeras cinco de La Liga desde su nacimiento como Vaqueros, ahora que hay un pitcheo decente y competitivo resulta que se derrumba como la penúltima de la zona. En anteriores temporadas apostarle a la mejoría en el pitcheo era ser ingenuos, este 2014 es factible, en cuanto al bateo en esta Liga es lo más probable a mejorar y por mucho, es decir, ahora confiar en que bateadores como Santiago González que tuvo un 2013 fantástico y el regreso del gran Oswaldo Morejón para la recta final de la temporada, aunado a Fox, Linares, Méndez, Orozco, Quintero y la agradable sorpresa que ha significado Saíd Gutiérrez que es líder de bateo del equipo y ha jugado una receptoría de campanillas, nos hace abrigar esperanzas. En esta liga contar con un buen pitcheo es un tesoro que no debes de dilapidar por falta de bateo. Vaqueros tiene ese tesoro y está a tiempo de que sus bateadores se pongan en el nivel que los lanzadores exigen. Esta vez la esperanza está basada en algo que no existía en años anteriores, un cuerpo de lanzadores competentes.

rrosell50@hotmail.com

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