La zona metropolitana de La Laguna ha perdido competitividad en los últimos años. Esta situación se traduce en un lento crecimiento del empleo y, en consecuencia, el aumento de la demanda laboral y la caída de los salarios promedio. Esta realidad representa un enorme reto para las autoridades estatales y municipales, así como para la propia iniciativa privada y, en general, para la sociedad en su conjunto.
El Siglo de Torreón publica hoy que la región se ubica en el lugar 65 de las 77 zonas analizadas en el reporte más reciente del Instituto Mexicano para la Competividad, A. C. (IMCO), que está basado en datos de 2012. Mientras que un trabajador en La Laguna gana en promedio cuatro mil 672 pesos al mes, en Mexicali, La Paz, Hermosillo y Culiacán, los salarios rebasan los nueve mil pesos.
Pero también frente a las capitales de Coahuila y Durango, la región muestra un rezago, ya que en Saltillo el salario promedio mensual alcanza los seis mil 600 pesos y en la llamada Perla del Guadiana, los seis mil 275. Incluso la desventaja de la comarca se da frente a ciudades con menor desarrollo y población, como Monclova y Piedras Negras, en donde los salarios son de cinco mil 524 y cuatro mil 880, respectivamente.
En cuanto a Producto Interno Bruto per cápita, La Laguna se encuentra en el lugar 16 de la lista de 77 zonas analizadas por el IMCO, por debajo de la capital coahuilense y la zona metropolitana de Monclova-Frontera. En contraste, el área conurbada lagunera supera a las dos anteriores en población al ubicarse en la posición número nueve.
Aunado a lo anterior, El Siglo de Torreón publicó el lunes 7 de abril que, de acuerdo a las cifras de asegurados de Instituto Mexicano del Seguro Social, la brecha del empleo entre La Laguna y las capitales de los estados que la dividen se ha abierto en los últimos siete años. Así, en este periodo, Saltillo ha generado 35 mil 389 empleos más que Torreón y Durango 25 mil 658 puestos de trabajo más que Gómez Palacio.
Otro dato relevante es el relacionado con empleo formal, que en la comarca no rebasa el 51 por ciento, lo cual la ubica en el lugar 46 de las 77 zonas estudiadas por el IMCO.
Una causa de esta realidad se puede encontrar en el hecho de que, si bien la región lagunera muestra un elevado fortalecimiento de la cadena productiva agropecuaria, así como en el sector minero metalúrgico y metalmecánico, esta tendencia económica es la misma observada desde hace más de 20 años y no han existido nuevos proyectos para desarrollar otros sectores y diversificar la economía.
De acuerdo al análisis del Resumen Económico de 2013 de El Siglo de Torreón, la falta de nuevas inversiones del sector industrial ha generado un freno en la generación de empleos, y ambas variables son determinantes en el aumento de los salarios promedio. Es decir, al existir una elevada oferta de trabajadores en busca de oportunidades, los salarios tienden a crecer lento e incluso a decrecer en detrimento del mercado laboral.
El diagnóstico parece completo, lo que ahora falta es la búsqueda y aplicación de soluciones por parte de los tres niveles de gobierno, el empresariado lagunero y la sociedad civil organizada.
