Una de las prácticas de discriminación más recurrentes ocurre al juzgar a una persona por su aspecto físico y a veces quienes se jactan de tener un cuerpo estético y vestir a la moda reciben ciertos beneficios, mientras aquellas que carecen de dichas características o posesiones soportan diversos tipos de rechazo.
Una chica decidió poner a prueba a algunas personas de su ciudad, al lucir con dos atuendos y aspecto físico diferentes en las mismas situaciones y así comprobar si las personas se guían por la apariencia de los otros.
Al realizar actividades como tomar un taxi, abordar el autobús, comprar golosinas, pedir 'aventón' o entrar a un centro de diversiones la chica 'fea' pidió servicios de forma gratuita pero para su mala suerte ninguno aceptó y negaron rotundamente darle gratis los productos
En cambio al cambiar su look a chica 'bonita' las cosas fueron radicalmente distintas, pues todos los servicios y productos que pedía eran entregados sin costo alguno y además, era atendida de forma inmediata.
Una misma chica con distinto atuendo y maquillaje en situaciones iguales recibió tratos distintos, comprobando en un pequeño sector de población las ventajas de 'ser bonita'.
La chica llevó a cabo un experimento para comprobar si la gente discrimina o no por apariencia. (YouTube)