Un sujeto en estado de ebriedad se presentó a una pequeña tienda de Budapest, Hungría, y en dicha condición intentó robar varios productos pero fue sorprendido por el despachador del establecimiento.
La cámara de seguridad del comercio permite ver el momento en que el encargado atiende a un cliente, pero atrás se alcanza a distinguir como un sujeto que apenas puede mantener el equilibrio toma varias cosas de un estante.
Cuando llega el turno de supuestamente atender al malhechor el muchacho de la tienda indaga al ladronzuelo y le pide que devuelva los artículos que tomó.
Al hacer la petición el trabajador arremete con tremenda bofetada al rostro del borracho, quien cae según él malherido.
Al tenerlo sometido el joven regaña severamente al presunto delincuente y además aprovecha para propinarle otros golpes hasta que finalmente lo expulsa a patadas del lugar.
El ladronzuelo no se sale con la suya y recibe una dura lección propinada por su propia víctima. (YouTube)