Madera. De la madera que encuentra en los lotes baldíos o basureros la transforma en muebles.
De los lotes baldíos saca troncos viejos y los transforma en muebles. Alfonso Suárez anda en todos los tiraderos de Torreón, ya los tiene bien ubicados, entre la basura siempre encuentra troncos que lija, pinta y finalmente vende en la calle.
"Es madera de los árboles que se secaron en la última helada, los sacamos de los baldíos, en el tiradero municipal que está por el aeropuerto. También en el río antes que hicieran la campaña donde limpiaron", explica Alfonso que para poder trabajar la madera, debe estar completamente seca.
Cuando fue la última helada se pusieron a buscar troncos, hasta darles la forma, altura y dimensiones.
Asevera que ellos no talan árboles, están en contra de eso. Un árbol recién cortado no sería útil para ellos pues deben pasar años hasta secarse completamente.
"Tengo que recogerlo ya seco, porque de otra manera me pesa mucho y llevo el riesgo de que en el proceso se me rajen, no sé cómo se va a secar. Así cómo lo encuentro, ya nada más lo corto y lo trabajamos".
Con moto sierras, lijas y sobretodo fumigación para evitar que la termita acabe con la madera es como va diseñando los muebles.
Alfonso no recibió ninguna capacitación o curso, él aprendió en el camino, por la necesidad, dice.
"Ahora sí que por mera necesidad, no sabíamos qué hacer para sacar lana, nos pusimos y le pegamos".
Utiliza maderas de árboles de Laurel de la India, Pingüico y principalmente de Pinabete. Los precios van desde los 500 hasta los 10 mil pesos.
El año pasado don Alonso y su hijo vendieron sus muebles y figuras de madera en Las Villas, pero asegura que ya saturó su mercado. Una cuñada suya le permitió ponerse en el patio de su casa, en la calle Carmen Pámanes.
Desde centros de mesa, bancos, comedores, desayunadores, sillas, maceteros y hasta figuras que surgen de la imaginación de Alfonso.
Los precios varían, vandesde 500 pesos hasta 10 mil pesos, las más caras son las piezas grandes y que van de acuerdo al gusto del cliente. Pueden ponerle simplemente un sellador para darle un toque más rústico o barniz que hace brillar la madera.