Arde. Agustín Gómez corre desesperadamente pidiendo auxilio tras prenderle fuego a modo de protesta.
El gobierno de Chiapas liberó la madrugada de ayer al dirigente del Frente "Ricardo Flores Magón", Florentino Gómez Girón, después de que su sobrino Agustín Gómez Pérez se inmolara el viernes afuera del Congreso del Estado para exigir la excarcelación de su tío.
Voceros del Frente informaron que el dirigente campesino, procesado desde mayo pasado en el centro penitenciario El Amate -del municipio de Cintalapa de Figueroa- por el presunto robo de siete cabezas de ganado, fue excarcelado después de las 4:00 horas de ayer; sin embargo, comentaron que desconocían los términos legales de su liberación.
Asimismo, ayer por la mañana decenas de campesinos retiraron la manifestación que sostenían desde el pasado 10 de noviembre a las afueras del Congreso de Chiapas para exigir la liberación de Gómez Girón.
En tres camionetas, los campesinos volvieron a sus comunidades en el municipio de Ixtapa.
Roberto Gómez, uno de los voceros, dijo que decidieron retirar la manifestación porque existen amenazas "de que nos van a desalojar con la fuerza pública si no nos retiramos por nuestra voluntad".
Gómez dijo que la salud de Agustín Gómez Pérez, internado en el hospital regional de Tuxtla Gutiérrez, es "grave" debido a las quemaduras que sufrió por inmolarse el viernes.
SE PRENDE FUEGO
Agustín Gómez Pérez, de 21 años de edad, se inmoló el viernes frente al Congreso del Estado para demandar la liberación de su tío Florentino Gómez Girón.
Como parte de la protesta, Gómez Pérez se acostó en el suelo y su cuerpo fue rociado con gasolina por otros manifestantes; se presentó un operador del Gobierno del Estado para pedir que no le "prendieran fuego" al joven.
"Vamos a revisar su proceso (de Florentino). Si se puede liberar, se va liberar, pero…", dijo el funcionario, identificado como José Luis Soto de la Torre, de la Secretaría de Gobierno, cuando un campesino que con un recipiente con gasolina replicó: "Si no se puede, no lo liberen. Estoy dispuesto a ir al Amate (prisión) por defender a un compañero. Aquí no hay democracia, no hay justicia. ¡Presos políticos libertad!", gritó.
De inmediato se dio la orden: "¡Échenle fuego!", "háganse para atrás"; el funcionario público apenas alcanzó a decir: "No le prendan…", pero en ese momento las llamas comenzaron a cubrir el cuerpo de Agustín Gómez.
El joven cubierto en llamas se paró y empezó a pedir ayuda. Corrió algunos metros hasta que uno de los hombres lo derribó. La ayuda no se hizo esperar, ya que hombres y mujeres con cubetas de agua, arena y extintores consiguieron apagar las llamas, mientras se retorcía del dolor.
Paramédicos que se encontraban en el lugar trasladaron al joven al Hospital Regional, quien presentaba quemaduras de segundo y tercer grado en 50% de su cuerpo.