Caos. Centenares de familias perdieron todo.
Como si fueran monumentos a la pobreza, en calles de las colonias Salvador Allende y Unidad del Pueblo se observan montones de cosas inservibles, que apenas hace dos días eran el patrimonio de más de 100 familias, cuyas casas resultaron dañadas por una inundación de hasta metro y medio de altura.
Ropa, colchones, muebles de madera, osos de peluche, zapatos, comida y hasta teclados de computadora están listos para ir el basurero. Y no es la primera vez que vuelven a empezar de cero, porque en 2010 con el huracán "Alex", el agua bronca que baja de lo alto del Cerro del Topo Chico, también tomó por asalto sus viviendas y arrasó con sus bienes.
En los últimos 20 años ciudadanos han construido en lo que fue una pedrera, pese a la amenazante cercanía del cerro mutilado, que deja ver una pared vertical de aproximadamente 50 metros de altura, que podría desgajarse en cualquier momento, y más con la humedad provocada por las lluvias.
El fin de semana, desde la parte alta del cerro bajaban torrentes de agua que formaron auténticas cascadas y el agua empezó a inundar las casas que hicieron las veces de bordo fallido de una represa.
