Como mencioné en mi artículo pasado, hablar del "gelato" o helado es muy extenso, así que ahora continuamos con nuestra historia. Los antiguos pobladores de lo que ahora se llama América eran personas muy religiosas. Creían, por ejemplo, que los aromas de los alimentos y las flores al "desaparecer" eran absorbidos por sus dioses o el ánima de sus antepasados; de tal manera, que al ofrecerlo a sus dioses o a sus muertos, éstos comían de aquellos manjares.
Los códices antiguos de la cultura teotihuacana, nos revelan que en México se celebraba una ceremonia religiosa para pedir a los dioses buen año de cosecha, esto en el día del equinoccio, y dentro de los manjares que preparaban para los dioses preparaban un tipo de nieve hecha a base de agua, leche, mieles y frutos de la época, como: capulín mamey, cacao, etc. Para esto, mandaban a traer con corredores especiales hielo de las montañas más altas, y en una olla de barro, ponían el líquido con las mieles y las frutas. Esta olla la ponían adentro de una cubeta de madera más grande donde ponían el hielo y sal, y a base de estar dándole vueltas, congelaban el líquido y quedaba la nieve, era un manjar de dioses. Esto fue en la civilización teotihuacana, ya en la Conquista, los frailes la perfeccionaron con su "gelato", principalmente de Italia.
Desde el Siglo XIX, en las grandes y pequeñas ciudades, vendedores ambulantes de "nieve de garrafa" recorren las calles con un "carrito" con varias cubetas de madera, y en su interior otra cubeta más pequeña de metal con la nieve, y entre una y otra cubeta, hielo con sal. Actualmente, existe en un pueblo del Distrito Federal en la que anualmente se hace una feria del helado, en fechas cercanas a la Semana Santa.
Aquí, en nuestra Comarca Lagunera se prepara un helado desde hace 35 años, de gran calidad con tecnología de vanguardia, con maquinaria propia y orgullosamente mexicana con estándares de producción equiparables al mejor nivel mundial para la elaboración de deliciosos helados.
Esta receta la compartió con nosotros el Ing. Humberto Ramos Galiano, creador de los mejores helados de la Comarca.
La receta Helado de mandarina (8 porciones)
* 2 tazas de jugo de Mandarina
* 4 tazas de crema de leche
* 1 1/2 tazas de azúcar o leche condensada
Procedimiento
Se licua el jugo de mandarina con la crema (agregándola poco a poco, para que no se corte). Se agrega el azúcar o leche condensada y se licua por cinco minutos o un poco más.
Se mete a congelar por varias horas (dos o tres horas), se vuelve a licuar y lo regresamos al congelador.
Contenido Nutrimental
* Comestible: 100 %
* Energía: 152.00 Kcal.
* Carbohidratos: 31.00 g.
* Grasas: 1.70 g.
* Proteínas: 3.10 g.
* Fibra: 1.70 g.
* AGSat: 0.20 g.
Presentación:
Como postre, o limpia paladar.
Maridaje:
Vino Blanco cepa Riesling.
Me despido de "Los sabores de Fiore", "Cocinando con historia", y como siempre, les deseo un buen provecho. La comida se disfruta aún más junto a una buena compañía. Los espero en mi página de Facebook "Los sabores de fiore", donde encontrarás más recetas y tips.
duranflorencia@gmail.com