María del Rosario Espinoza. (EFE)
La carrera de la taekwondoín María Espinoza va cuesta arriba. Luego de enfrentar algunos descalabros durante el año, la sinaloense comienza a retomar el vuelo.
Ayer, Espinoza fue la única mexicana que logró subir al podio en el Grand Prix de la especialidad que se realiza en el Centro de Convenciones de Querétaro al llevarse la medalla de plata en la categoría de más de 67 kilos.
Dos veces medallista olímpica, María superó la ronda de semifinales en punto de oro ante nada menos que la actual campeona olímpica, la serbia Milica Mandic, por 2-1.
En la disputa por el oro, la oriunda de La Brecha cayó por marcador de 3-1 ante la francesa Carolina Graffe.
El objetivo de mantenerse como una de las mejores del mundo va en serio, pues hace menos de un mes la seleccionada se llevó la áurea en los Juegos Centroamericanos de Veracruz al vencer a la campeona mundial vigente.