La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) informó que de acuerdo con los principales indicadores macroeconómicos, en el primer trimestre de este año la actividad económica en México continuó mejorando.
En su informe sobre la situación económica, las finanzas públicas y la deuda pública, expone que “la economía está fortaleciendo su recuperación conforme avanza el año”.
Refiere que la economía aceleró su ritmo de crecimiento respecto al trimestre inmediato anterior y en febrero de este año el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) registró un crecimiento anual de 1.7 por ciento.
Dicho incremento, señala, fue el mayor observado en los últimos siete meses, lo que obedeció a un mayor dinamismo en la actividad agropecuaria y de servicios.
Destaca además que en los primeros tres meses de este año el empleo siguió creciendo, y a finales de marzo el número de trabajadores afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se ubicó en 16.8 millones de personas.
En tanto, la inflación general anual mostró una tendencia decreciente y se ubicó en 3.76 por ciento al cierre del lapso referido.
La dependencia expuso que el efecto de la reforma hacendaria permitió fortalecer la postura fiscal, mejorar la salud del sistema tributario y facilitar el cumplimiento de las obligaciones tributarias.
Lo anterior, señala, de acuerdo con los resultados preliminares de las finanzas públicas alcanzados en el primer trimestre de este año, las cuales reflejan el mayor dinamismo del gasto público, primordialmente en lo que respecta a la inversión y desarrollo social.
Refiere que la estrategia prudente en el manejo del financiamiento, aunada al proceso de implementación de reformas estructurales, fue reconocida en febrero pasado por la mejora de las calificaciones de Moodys, que elevó la calificación crediticia de la deuda soberana de México.
En ese sentido, subraya que “es importante destacar que esta es la primera ocasión en que una de las principales calificadoras internacionales otorga a México una calificación en el rango de A”.
Agrega que las reformas estructurales, el mejoramiento del marco de la política fiscal, así como la mejora crediticia, fortalecen las perspectivas positivas sobre la economía.
