Lupita , como es conocida la anciana, aseguró que espera votar varias veces más: Lo único que me duele es la rodilla y de eso nadie se muere, así que voy a votar muchas veces más. (Archivo)
Una mexicana de 102 años de edad, residente de Los Ángeles, se mostró hoy orgullosa de haber votado por primera vez en una elección en Estados Unidos.
La nueva votante, Guadalupe Portillo, originaria del occidental estado mexicano de Jalisco, antes de votar en una casilla electoral se dijo nerviosa y emocionada, y agregó que sólo le duelen las piernas, por lo que seguirá votando “por muchos años más”.
Al salir de su casa fue acompañada por un grupo de mariachi que entonó Las Mañanitas para que ella y otros votantes de primera vez en el barrio de Lincoln Heights, en el Este de Los Ángeles, se animaran a acudir a las urnas.
El grupo de mariachi hizo un arreglo a la letra original y entonó: "Estas son las mañanitas que cantamos para ti, para los nuevos votantes, los que votamos aquí".
"Me siento muy orgullosa de poder votar, es algo muy importante, así podemos cambiar las cosas, todos los que pueden votar deberían hacerlo", expreso Portillo.
La necesidad de acercar al público inmigrante a los centros de votación fue lo que impulsó a los activistas de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes (CHIRLA, por sus siglas en inglés) a llevar un grupo de mariachis para animar a los electores.
Especialistas han estimado que para esta jornada se espera uno de los más altos índices de abstencionismo en California en donde el proceso electoral paso casi desapercibido en las últimas semanas.
Los votantes del área de Lincoln Heights fueron recibidos esta mañana con la adaptación de la tradicional canción mexicana.
Portillo se convirtió en el rostro de una acción desesperada que buscó cambiar los pronósticos sobre la baja participación de la comunidad latina en unas elecciones legislativas que no despertaron gran interés en California.
"No podemos pensar que porque no elegimos presidente o senadores no es importante, todas las elecciones por pequeñas que sean son trascendentales", advirtió Angélica Salas, directora de CHIRLA.