Expectativas. El 82 por ciento de los mexicanos dijeron tener experiencias positivas durante el día.
A pesar de obtener la mitad de los ingresos que reciben al año las personas de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), trabajar el doble de horas y tener menores expectativas de empleo y de vida, los mexicanos manifiestan estar más satisfechos, tener sentimientos de paz, de gozo y sentirse orgullosos de sus logros.
Al dar a conocer el Índice para una Vida Mejor, el secretario general de la OCDE, el mexicano Ángel Gurría, asegura que este año la organización "se ha propuesto presentar qué es lo que más le importa a las personas", esto es, medir el bienestar y el progreso. El Índice permite medir y comparar a los 36 países miembros de ese organismo internacional en 11 temas como vivienda, ingresos, empleo, comunidad, educación, medio ambiente, compromiso cívico, salud, satisfacción y seguridad.
Lo que revela el mapa interactivo es que mientras los japoneses se preocupan más por la seguridad, los australianos buscan un balance entre empleo y vida familiar.
Los latinoamericanos centraron su atención en la educación, en tanto que los daneses y sudafricanos "sólo quieren ser felices".
Al dar a conocer el mapa la OCDE, reveló que los mexicanos son los más satisfechos con su vida.
Entre los mexicanos 82% de las personas dijeron tener más experiencias positivas en un día, tales como sentimientos de paz, satisfacción por sus logros y gozo.
En tanto la preocupación, el dolor, la tristeza y el aburrimiento, entre otras expresiones "negativas", son menos frecuentes entre los mexicanos.
Ello a pesar de que el ingreso familiar disponible neto ajustado promedio per cápita es de 12 mil 850 dólares al año, cifra menor que el promedio de la OCDE de 23 mil 938 dólares.
En México la gente trabaja 2 mil 226 horas al año, cifra mayor que el promedio de la OCDE de 1 mil 765 horas.
Alrededor de 61% de las personas entre 15 y 64 años de edad en México tienen un empleo remunerado, cifra menor que el promedio de la OCDE de 65%.
En cuanto a la educación, el estudiante mexicano promedio obtuvo una calificación de 417 puntos en lectura, matemáticas y ciencias en el Programa para la Evaluación Internacional de Estudiantes (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE. Esta calificación es más baja que el promedio de la OCDE de 497 puntos.
En el campo de la salud, en México la esperanza de vida al nacer es de casi 74 años, seis años menos que el promedio de la OCDE de 80 años.
La participación electoral, una medida de la confianza pública en el gobierno y de la participación ciudadana en el proceso político, fue del 63% durante las recientes elecciones, cifra menor que el promedio de la OCDE de 72%.
La condición social y económica puede afectar los niveles de votación, sin embargo, en México existe poca diferencia entre los diversos grupos socioeconómicos.
No escapan de la pobreza
En México tener un trabajo no garantiza salir de la pobreza:
⇒ El 18.5 por ciento de la fuerza laboral no cuenta con el ingreso suficiente para cubrir sus necesidades básicas, según la OCDE.
⇒ Contar con un empleo ya no es garantía de poder adquisitivo y que haya una parte de la población que aun trabajando esté en condiciones de pobreza es preocupante.
⇒ México es el que que tiene el porcentaje más alto para incidencia de pobreza en empleo, seguido muy de cerca por Turquía donde la tasa es de 18 por ciento y luego por Chile e Israel, ambos con tasas aproximadas al 15 por ciento.
⇒ Esta condición se acentúa para ciertos grupos de población, por ejemplo para padre o madre solteros o parejas con hijos pero de un solo ingreso.
⇒ En el país existe una fuerte desigualdad en ingresos, entre ricos y pobres, está en su nivel más alto y esto tiene un efecto debilitador en el crecimiento económico y el bienestar.
México es entre las 34 economías de la OCDE el segundo país donde más inequidad existe, sólo por debajo de Chile.
⇒ La desigualdad debilita las sociedades y daña a las economías, no es suficiente para poner en práctica políticas que potencialicen el crecimiento, también debemos asegurarnos de que los beneficios del crecimiento sean compartidos por todos.