La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) consideró errónea y con un trasfondo político la medida anunciada este miércoles por el gobernador texano Rick Perry.
Tras expresar "su más profundo rechazo y condena" por el despliegue de los primeros elementos de la Guardia Nacional de Texas, anunciado este miércoles por la oficina del gobernador de ese estado, Rick Perry, el gobierno de México consideró que la medida es errónea y utilizada con fines políticos.
En un comunicado, la Secretaría de Relaciones Exteriores subrayó que "resulta irresponsable manipular el estado actual de la seguridad fronteriza con fines políticos".
Señaló que la medida emprendida de manera unilateral por el gobierno de Texas es indudablemente errónea y no contribuye a los esfuerzos que los países llevan a cabo para construir una frontera segura y una solución al fenómeno migratorio. Tampoco abona al acercamiento de nuestras sociedades y se opone a los principios y valores sobre los que México y Estados Unidos rigen su relación bilateral.
La cancillería mexicana reiteró que el fenómeno migratorio debe ser atendido desde una perspectiva integral y regional, con una visión de mediano plazo y responsabilidad compartida que garantice la paz, inclusión y prosperidad en la región.
