El Señor hizo a la cebra.
A los pocos días ella se le presentó y le dijo:
-Señor: tengo una duda que sólo tú me puedes aclarar.
Preguntó el Hacedor:
-¿Qué duda es ésa?
Respondió la cebra:
-Dime, Señor: ¿me hiciste blanca con rayas negras, o negra con rayas blancas?
Cientos de miles de años han pasado desde entonces, y es fecha que el Creador no puede contestar esa pregunta. Cuando aparece el tema dice mohíno:
-No debí haber hecho a la cebra. Es muy preguntona.
¡Hasta mañana!...