El Funcionario del Estado hizo llamar al señor equis y le preguntó, severo:
-¿Cuál es tu color favorito?
Respondió con inquietud el señor equis:
-El azul.
-En adelante -le informó el Funcionario- deberás pagar un Impuesto cada vez que uses una prenda de ropa de color azul.
El señor equis, tembloroso, le dijo al Funcionario:
-Perdón, me equivoqué. Mi color favorito es el verde.
Lo dijo porque casi nunca usaba una prenda de ese color.
-Igualmente deberás pagar el Impuesto -replicó el Funcionario-. También lo pagarás si usas prendas de color rojo, gris, negro, morado, amarillo, café, rosa, lila, anaranjado, etcétera. Ahora el señor equis está pensando seriamente en hacerse nudista.
¡Hasta mañana!