El Señor hizo los cielos y la tierra.
(Ahora el hombre los está deshaciendo).
Llenó los cielos con toda suerte de aves, y colmó la faz de la tierra con miríadas de criaturas animadas.
Luego puso en el mar los peces.
En seguida creó a Adán.
Y por último, ya diestro en el arte de crear, hizo a Eva.
Tiempo después el Padre llamó al hombre y le preguntó qué opinaba del universo que había hecho para él.
-Está muy bien, Señor -admitió Adán-, pero le falta algo.
-¿Qué? -preguntó el Creador, intrigado.
-Los médicos -respondió mohíno el hombre-. Necesito que los hagas para que le quiten a Eva esos dolores de cabeza que le dan todas las noches.
¡Hasta mañana!...