La explosión que se registró el pasado 29 de julio en la colonia Cerrito Colorado, en el norte de la ciudad de Querétaro, cobró sus dos primeras víctimas mortales, reportó el director de la Unidad Municipal de Protección Civil, Amadeo Lugo Pérez.
En declaraciones, el funcionario detalló que anoche murió la niña Paulina, quién el día de la explosión de una pipa transportadora de gas LP resultó con graves quemaduras y trasladada a un hospital del IMSS en la Ciudad de México.
En tanto, esta mañana murió el ciudadano Roberto Rojas Betancourt, de 37 años de edad, quién también resultó con lesiones y quemaduras graves a causa del evento del 29 de julio, expuso Lugo Pérez.
Cabe recordar que aquel día el conductor de la pipa pasó por un tope sin el debido cuidado, lo que dañó una válvula y provocóa fuga de gas que ardió de inmediato.
El titular de Protección Civil manifestó que la empresa gasera, de origen privado, deberá cubrir los gastos ocasionados por el error humano que habría cometido el personal a su cargo.
