Veinte personas, en su mayoría niños de entre 10 y 15 años, murieron hoy al chocar el autobús en el que viajaban en la localidad de Nawabshá, en el suroeste de Pakistán, informó una fuente policial.
"En el autobús viajaban un total de 25 personas, incluyendo el conductor, los estudiantes y tres profesores", detalló poco después del siniestro un responsable policial de Nawabshá, Asif Alí, quien reconoció que aún no se ha identificado a todas las víctimas.
La fuente añadió que 18 personas murieron en el acto y que otros dos niños fallecieron poco después en el hospital a causa de las heridas sufridas.
El accidente tuvo lugar poco después del mediodía local cuando el vehículo escolar, que venía de una localidad cercana, chocó de frente con un camión que circulaba por una calle de la localidad meridional "al parecer a una velocidad excesiva", según Alí.
El autobús volcó a causa de la colisión y se salió de la calzada.
El conductor del camión sobrevivió al siniestro y se dio a la fuga, por lo que la Policía ha organizado un operativo en la zona para localizarlo.
De acuerdo con medios locales, diversas autoridades han mostrado su consternación por la muerte del trágico suceso.
Pakistán cuenta con uno de los índices más altos del mundo de accidentes de tráfico debido al pésimo estado de las carreteras, a las deficiencias de los vehículos y a que los transportes públicos suelen circular sobrecargados de pasajeros.
La semana pasada murieron una docena de personas tras el choque de dos autobuses cerca de Islamabad, y hace mes y medio siete niños y el conductor del motocarro que los llevaba a la escuela murieron tras ser arrollados por un tren en el sur del país.
