Quien diga que en Torreón no se han generado fuentes de empleo está equivocado… basta hacer un recorrido por el ejido El Águila rumbo al Centro de Readaptación Social (Cereso) y solamente en este pequeño tramo podrá observar la gran cantidad de empleos ahí generados… vendedores de tacos de tripitas, hamburguesas, tacos, gorditas y tamalitos doraditos.
Este mismo boom laboral se puede apreciar iniciando la noche pues son muy pocas las tiendas de autoservicio que en sus puertas de acceso todavía no tengan gente ofreciendo burritos, tamales de hoja y en algunas partes hasta atole. Quedan muchas esquinas en nuestra ciudad esperando la llegada de un interesado en vender tacos de intestinos, hígado, buche o carnitas.
El Güero, el que vende gorditas, por cierto muy sabrosas, ha recibido a decenas de interesados en comprarle chonchas al mayoreo para empezar a vender en algún crucero y formar parte de esta cadena empresarial. Por otra parte, cada vez es mayor el número de personas que empujando un carrito para mercancía, de esos que se usan en los supermercados, ofrece avena, jugos, emparedados y burritos dietéticos y esta actividad comercial ha sido otro gran acierto en la apertura de fuentes de trabajo para los laguneros.
Se ha detectado también que lo que empezó en algunos puntos del medio rural ya llegó a la mancha urbana y me refiero a los vendedores de agua de coco. Otra línea interesante es la creciente cadena de vendedores de fruta, en vaso o en bolsita. Las famosas gorditas al carbón que surgieron a principios de los ochenta en el vado que une a Torreón con Gómez Palacio, son ahora la fuente de ingresos que sostiene a muchas familias.
No tiene mucho tiempo que surgió una novedad en fraccionamientos del Infonavit y otros sectores, en casas particulares se venden los conocidos vasos michelados, también ha crecido la industria de la comida casera ofreciendo todo tipo de guisados: asado, sopa de arroz, mole, chiles rellenos, frijolitos, solos o con queso, espagueti, rajas y todo tipo de antojitos que son de gran apoyo a las amas de casa.
Por un amplio sector de la zona comercial de Torreón se observan algunas jovencitas que viajan en bicicletas llevando una pequeña tina donde cargan su mercancía, burritos que entregan sobre pedido y haciendo clientes nuevos, normalmente son de chicharrón prensado, papas con chile, huevo y claro… frijolitos; sin embargo, el mayor campo generador de empleo en nuestra ciudad es sin duda alguna la industria del crucero donde se puede encontrar de todo, limpiaparabrisas, franeleros, vendedores de agua embotellada, pollitos, máscaras, semillas, jóvenes con grandes dotes para dominar el balón de una manera impresionante, malabaristas, bailarines, otros que hacen todo tipo de piruetas, payasos, y una gran cantidad de personas que carece de la seguridad social pero que atrapada por la desesperación y la necesidad de sostener a sus familias hace de todo, esas son las fuentes de empleo generadas en La Laguna, donde ya se abrió otra universidad. Qué poca.
Por Martín Chávez