La pobreza siempre ha sido generadora de votos, por esa razón siempre estará en constante crecimiento, esa es una lógica en nuestro país, estado y municipio y… mientras más pobres haya, habrá por consecuencia más seguridad en el control político-social que por conveniencia rechaza la democracia y la libre expresión de la gente… Esa es una gran lógica en nuestro mundo y debemos entenderla, no aceptarla, aunque no aceptar sin acciones, pues para el caso es lo mismo.
Se entiende la política y la pobreza, como el desempleo y la gran empresa… Mientras más pobres, más votos seguros, mientras mayor sea el desempleo, más barata la mano de obra. Hace días se dijo en medios informativos que en nuestra entidad habitan más de 93 mil personas que viven en condiciones de pobreza extrema refiriéndose a la gente que presenta tres o más carencias y no tiene para comprar comida, pero si nos referimos únicamente a pobreza, entonces seguramente el número de coahuilenses que viven en esas condiciones será mucho mayor, pues pobreza es la persona con al menos una carencia y no tiene ingreso para satisfacer sus necesidades.
Luego de revelarse el dato surgen todo tipo de explicaciones a cerca de los programas implementados para reducir los niveles de pobreza y las acciones desarrolladas con el mismo fin, pero al final nos encontramos lo mismo, el pobre cada vez más pobre. El año anterior se presentó en el Congreso del Estado la iniciativa de ley para la Prevención y Combate a la Pobreza Extrema en un planteamiento, según se dijo, encaminado a que todos los coahuilenses en esa condición tengan acceso a la alimentación, a la seguridad social, a los servicios básicos en vivienda, salud y apoyo económico, documento romántico que se refiere a un mundo más armónico.
Cuando se terminó de leer el documento en la tribuna más importante de Coahuila, todos los legisladores estuvieron de acuerdo en respaldarlo y entonces surgió en Coahuila La Ley Antipobreza para que en la entidad ya no haya pobres y menos pobreza extrema. Los números variaron, más pobres y pobres extremos en el 2014 y ahora además de la citada ley se integraron los Comités Regionales de la Cruzada Nacional Contra el Hambre, que contempla sesiones, mesas de trabajo, congresos, etc.
En México y en Coahuila siguen coexistiendo dos mundos, uno el habitado por menos del 10 por ciento de la población, los que participan en política y aplauden los discursos del gobierno de progreso y bienestar porque los viven y el otro, el de la gran mayoría y aunque somos más, no tenemos ningún peso en las decisiones políticas y económicas. Coahuila se desmorona y los discursos y fanfarrias mediáticas que pretenden hacer creer que vamos a la solución de los múltiples problemas que históricamente persisten en la entidad, ya no convencen a nadie. No sé quién lo dijo, creo que fue George Washington: "La política es el arte de obtener el dinero de los ricos y el voto de los pobres con el pretexto de proteger a los unos de los otros". Coahuila es un estado con más de 93 mil habitantes que no tienen para comer y muchos miles más con necesidades básicas.
Por Martín Chávez