En nuestra nación, la política salarial coloca en situación de pobreza a más del 50 por ciento de las y los trabajadores, cuyo ingreso les impide adquirir la canasta básica recomendada para una alimentación saludable. Como parte de las actividades que se desarrollan en la Cámara de Diputados y concretamente durante el foro "Reforma Laboral en México", Gabriela Besunsan, abogada laboralista, consideró que una buena medida encaminada al abatimiento de la problemática citada, sería que el Legislativo de San Lázaro definiera los aumentos salariales, aunque hace días distintos organismos nacionales e internacionales denunciaron la pérdida del poder adquisitivo en México, debido al desigual incremento salarial y el aumento exagerado de la canasta básica. En los últimos cinco meses el costo de los productos de la canasta básica -pollo, huevo, carne, aceite, frijol, azúcar, arroz, queso, leche y tomate--, aumentó de entre tres y cinco pesos. El Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara Baja, sostiene que el poder adquisitivo de los trabajadores se redujo en 45 por ciento desde el año 2000 y recuerda que hace una década, las familias de México podían comprar 20 productos básicos con 270 pesos, alimentos y bienes que hoy tienen un costo promedio en el mercado de más de 600 pesos, de ahí que para tener acceso a la alimentación recomendable se necesitaría laborar diez jornadas, indica el citado análisis. Comparé el estudio de este centro con el que hace todos los días mi amigo "El Borja" hablando de economía y sobrevivencia. Me dijo: Mira, pude visitarte porque me sobró un peso y así completé para el camión; para comer mañana no hay problema porque ya guardé los ocho pesos que necesito para comprar la bolsa de medio kilo de frijol cocido, sale más barato que cocerlo en la estufa, si no vas a cocer más del kilo no tiene caso que gastes gas, desde ayer compré cinco sobres para hacer agua de sabor, y como compré Frisco a dos pesos y cada uno te da para dos litros, es mejor que el Tang o el Suko que cuestan hasta tres pesos; la papa la conseguí a siete pesos y de una vez compré el kilo de tortillas en Ley a 6.90; en Aurrera cuesta siete, en Soriana te lo dan a ocho o nueve, pero en las tortillerías sin papel a 11.50 y con papel a 12 pesos, tienes que buscarle. A partir de ese momento "El Borja" me enteró de los precios del azúcar, de la que me dijo que dependía de la marca y el lugar donde la compras, las pastas para sopas las puedes encontrar hasta a 3.50 y la carne Guten, res, pollo, picadillo de 475 gramos precocida en centros comerciales arriba de 30 pesos, pero si le buscas bien la consigues a 22.50. Cuando estás en estas condiciones y te va bien algún día, puedes comprar chorizo y es mejor una tira de once o doce pesos, es más 'bara' y te dura más. Para "El Borja" un peso es fundamental, a pesar de su discapacidad se ve obligado a caminar largas distancias, con el fin de ahorrar un peso, un peso que al siguiente día o esa misma noche se convierte en lo que falta para el medio kilo de frijol cocido.
Por Martín Chávez