Los años pasan en las empresas y los resultados y datos van y vienen, sin embargo, la suma de ciertos años genera información que en algún punto será importante recuperar o consultar.
El dinamismo de los negocios es muy cambiante y en ocasiones impredecible. Dependiendo el giro y tamaño de las empresas, existen temporalidades en las que se registran repuntes de datos. La información que se genera durante una venta nocturna en temporada navideña o las fechas de inscripciones en una universidad, son por ejemplo, puntos clave del año en los que una empresa incrementa su procesamiento de datos. Llega a suceder que las empresas no están preparadas y los equipos de cómputo o servidores resultan insuficientes para la cantidad de información que se está generando.
Una nube privada es ideal para aquellas empresas que tienen un crecimiento acelerado en la información.
Las alternativas están a la orden del día, lo primordial para una compañía es saber a quién confiarle su información, aunque es necesario recalcar que independientemente de que un tercero resguarde los datos de una empresa, existe la posibilidad de que el control siga estando en las manos del encargado de tomar decisiones.
Existen empresas que están muy conscientes del valor de la información y toman acciones, pero muchas otras pasan por alto los problemas que puedan generar tanto la pérdida de ella como no aprovecharla a nivel de Tecnologías de Información (TI).
La tecnología está a la mano, pero ignorar lo que el mercado ofrece pone a las empresas un paso atrás de la competitividad que buscan; la falta de claridad y en ocasiones de un departamento de TI, genera desventajas y fuga de roles de trabajo.
Se ha identificado que un empleado puede llegar a invertir de cuatro a siete horas semanales en labores de TI, sin que sea experto. Regularmente, una persona encargada de otra área, sabe un poco de tecnología y apoya con sus conocimientos, sin embargo, esto no garantiza que resuelva una dificultad. Todo esto se traduce en una disminución de productividad porque los objetivos laborales de esta persona se desvían.
Es aquí, cuando actores como Alestra intervienen con sus mejores prácticas para tomar el papel de un tercero en el que las empresas pueden depositar su información y toda su confianza. La principal necesidad del cliente es el control de la información y de la infraestructura, y la única forma de saber qué tanto es lo que se requiere es acercándose a un proveedor de TI para que les proporcione un diagnóstico acertado y personalizado.
Los principales puntos que se deben considerar son:
Evaluación de necesidades: El cliente ya está buscando un proveedor de TI que le brinde servicios de nube de primera calidad. En este sentido, los expertos en TI están conscientes de que Cloud Computing se trata de agilidad, flexibilidad y dinamismo, por ello, el proveedor deberá poder ofrecer un mecanismo eficiente para cotizar y aprovisionar los servidores que se buscan. Determinar quién estará apoyándo con el respaldo de información es el punto fundamental que propiciará que la empresa genere ahorros, competitividad y productividad.
Evaluación de los equipos de cómputo o servidores: Se ha identificado que en ocasiones las empresas compran servidores, para cubrir esos repuntes de información, que después se quedan como adorno de oficina, es decir, se subutilizan. En contraste, existen empresas en las que sus equipos requieren mayor memoria o definitivamente ser suplidos por nuevos. Ahora existen alternativas en las que no hay que preocuparse más por limpiar el polvo de un servidor o cambiar un equipo, la infraestructura se puede alojar en el corazón del Centro de Datos de Alestra.
Hay empresas que cuentan con tecnología con tres o cuatro años de antigüedad y adoptar servicios en la nube con un tercero, genera entre 30 y 45 por ciento de ahorro; incluyendo factores como mantenimiento, energía y personal, esto conlleva el ahorro en forma general.
NUBE HÍBRIDA
Una gran ventaja de una nube privada es que existe la posibilidad de conectarse a una nube pública para crear una nube híbrida. ¿Cómo funciona esto? Como los casos que ya se mencionaron, existen repuntes de procesamiento de datos durante un año laboral. La manera idónea de prepararse para este momento es justamente acercarse a un proveedor que dé la posibilidad de conectarse a una nube pública (con más memoria y agilidad), proveedores como Alestra preconfiguran la conectividad para que en el momento que se requiera se active la nube híbrida. Esto es igual a crecimiento de infraestructura por temporada y una ruta al crecimiento empresarial.
Empresas de cualquier nivel se están sumando a la ola de la tecnología. El impulso y las ventajas de las nubes privadas comienzan a surgir, los resultados favorables y el crecimiento que perciben las empresas, son elementos que hacen que especialistas en TI pongan sus mejores esfuerzos en la mesa para hacer de la tecnología un traje a la medida.
Súbelo a la nube
Tres ventajas de contratar este servicio:
Costos: La empresa ya no tiene que invertir en equipos de cómputo, capacitación de personal para la configuración y mantenimiento del mismo o desarrollo del software. Además, el usuario paga únicamente por los recursos que utiliza.
Competitividad: Al no tener que adquirir equipos costosos, las pequeñas empresas pueden tener acceso a las más nuevas tecnologías a precios a su alcance pagando únicamente por consumo, lo que las pone en igualdad de condiciones con otras más grandes.
Disponibilidad: El proveedor está obligado a garantizar que el servicio siempre esté disponible para el cliente.
Twitter: @lochoaz