Polonia 1962. Anna es una guapa jovencita de 18 años que se prepara para convertirse en monja en el convento donde ha vivido desde que quedó huérfana, siendo muy pequeña.
Pero es el descubrimiento de que tiene una pariente viva -Wanda, la hermana de su madre- lo que la lleva a tomar la decisión visitarla antes de tomar los votos.
Ambas se embarcan juntas en un viaje de descubrimiento sobre ellas mismas y de su pasado común.
Anna descubre que su tía no sólo es una antigua abogada del Estado comunista, conocida por sentenciar a sacerdotes y a otras personas a muerte, sino que además es judía.
Descubre así que ella también es judía y que su verdadero nombre es Ida.
Esta revelación hace que la joven inicie un viaje para descubrir sus raíces y para enfrentarse a la realidad sobre su familia.
Esta película, la quinta del director Pawel Pawlikowski, tiene como escenario la Polonia de los años 60, una época de cierta apertura en el opresivo régimen comunista que gobernaba ese país.
El filme contrapone los personajes de Ida y Wanda, tan disímiles como profundos par crear una fascinante metáfora y reflexionar sobre la importancia de las raíces.
La realización del largometraje en banco y negro suma a esta trama enmarcada en el dolor del Holocausto y la represión comunista, los horrores de la historia polaca del siglo XX.
"Ida" ha arrasado en los festivales en que se ha presentado, tanto en su país como en el extranjero. En Gijón, por ejemplo, obtuvo seis premios. En Toronto también
Fue reconocida y es finalista en la categoría de mejor película extranjera de los Óscar.
