Nutritivos, ricos, pero insuficientes

Tendencias alimenticias abundan. Desde las dietas que prometen bajar de peso en días, hasta aquellas que se enfocan sólo a algunas partes del cuerpo... las que están influenciadas por los astros y los alimentos que comen los famosos para verse siempre jóvenes y bellos. En esta búsqueda por la belleza y el bienestar, siempre nos hemos encontrado con una gran cantidad de modas. Es así que desde mediados del año pasado y hasta la fecha, los smoothies, son la 'onda' para bajar de peso y conseguir una buena nutrición, de acuerdo a sus seguidores. Pero, ¿qué es un smoothie? Es una bebida que, lejos de ser nueva, la mayoría ya la conocemos con otro nombre: Licuado. Pues bien, esta tendencia está generando una gran atención por ser rápida, nutritiva y de buen sabor. ¿Qué más podríamos pedir en un mundo tan acelerado y a la vez tan preocupado por el bienestar como en el que vivimos actualmente? Sin embargo, al ser un elemento que impacta directamente en nuestra salud, resulta necesario analizar a fondo sus beneficios y perjuicios en nuestro organismo.

“El término 'smoothie' es totalmente inglés y básicamente en sus inicios, allá por la década de los 30's era sólo fruta, jugo de fruta y hielo. Lo que nosotros siempre hemos conocido como un licuado”, explica la doctora Nadia Heredia Hernández, especialista en Nutrición. “A diferencia de las malteadas que es nieve con leche y fruta, o de los frappés, que son agua con jarabe de frutas y hielo, el smoothie combina fruta, verdura, agua, leche o yogurt, algún cereal integral, frutos secos y por supuesto hielo para darle un sabor más fresco”.

No sustituyen al desayuno

Para quienes se están preguntando si esta bebida puede sustituir a un desayuno, la respuesta es no. Hay que recordar que el desayuno es el alimento principal porque se está rompiendo un ayuno y se le proporciona al cuerpo la energía para todo el día. “Un desayuno o comida debe tener la mayoría de los grupos de alimentos: cereales, lácteos, leguminosas, frutas, verduras, grasas y azúcares y resulta imposible combinar todos, con una porción adecuada en tan sólo un licuado, pues su sabor no sería agradable y su tamaño sería muy grande”. Por eso, de acuerdo a la doctora Heredia, el smoothie puede tomarse en el desayuno, pero combinado con otros alimentos, como unas quesadillas o una tortilla integral con frijoles y queso.

El licuado además, debe ser variado y no abusar de su consumo, pues lo recomendable es que sólo se prepare 2 ó 3 veces por semana pero combinando diferentes ingredientes. “Hay personas que creen que ese licuado es su ración de verdura en el día, pero en realidad hace falta la ración de la comida y la cena. Además, es muy necesario darle al organismo otros nutrientes. Si nada más comes espinaca y pimiento te estás perdiendo el resto de las verduras que tienen otras vitaminas, minerales y antioxidantes. Si nada más vas a ponerle dos frutas, te faltan otras, lo mismo con el caso de los cereales integrales”.

Los smoothies también pueden tomarse al medio día o en la cena, pero en la comida de la tarde sí es necesario complementarlo con muchos otros nutrientes. “Si acostumbras tomar refresco, puedes sustituirlo con un smoothie hecho con agua”, sugiere la doctora. “En la cena debes tener cuidado de elegir alimentos que no te provoquen una digestión lenta”.

La doctora también destaca la importancia de las texturas de los alimentos. “No hay que olvidar la parte emocional cuando comemos. El alimento causa placer y esto tiene mucho que ver con las texturas. Si todos los días tomas el licuado, llegará un momento en que no lo toleres. Por eso sólo se recomienda consumirlo 2 ó 3 veces por semana”.

El smoothie perfecto

Para hacer un smoothie, debes combinar: dos verduras con una ración de fruta, cuatro cucharadas de cereal integral, 3 almendras o nueces y dos tazas de agua leche o yogurt, además de hielo. Por ejemplo: media taza de espinacas con pimiento, fresa, avena, nueces y leche descremada. “Hay muchas combinaciones que se pueden hacer, sólo se debe cuidar que los alimentos no provoquen molestias en el organismo, pues la mezcla no provoca malestar pero el organismo sí puede ser intolerante a ciertos alimentos”.

Además, debes preferir la licuadora en vez del extractor. “En una mezcla realizada en el extractor, sólo te están dando el jugo, pero sin la fibra que contiene la fruta o la verdura”. Si vas a un establecimiento a comprar un smoothie, debes fijarte que los productos sean frescos o congelados, porque su valor nutricional será mejor que aquel que ya te venden envasado. “También resulta recomendable que al pedir un smoothie o al prepararlo no se le agregue proteína en polvo, pues el organismo tan sólo requiere un 15 por ciento de proteína en su alimentación diaria, si sobrecargas a tu cuerpo de proteína, a corto plazo no habría problema, pero a largo plazo se podría tener problemas renales por el consumo excesivo”.

¿Sirven para bajar de peso?

Si una persona tiene la intención de bajar de peso, antes de iniciar cualquier dieta, un profesional debe evaluarlo para valorar su peso, talla, medidas, actividad diaria, ejercicio que realiza, etc., y así poder calcular la cantidad de calorías que necesita a lo largo del día. “Cuando una persona realiza dietas restrictivas, lo que pierde es músculo o líquidos, pero la grasa sigue ahí. Para perder peso es necesario llevar una alimentación equilibrada y hacer ejercicio, eso es indispensable”, asegura la doctora.

En el caso de los smoothies, si una persona, sólo consume estos licuados en la mañana, en la tarde y en la noche, sí va a bajar de peso, pero a un costo muy alto. “Además, de que los smoothies no contienen todos los nutrientes necesarios para el organismo, la persona va a modificar todo el sistema metabólico de su cuerpo. Si el cuerpo no tiene la energía necesaria, porque se le está dando de comer muy poco, comienza a tomar energía de donde puede y lo primero que consume es el músculo y mucho después la grasa”.

Es por ello que al terminar con el plan alimenticio 'de moda', en este caso de los licuados, las personas tienen un efecto de rebote. “La persona no aprendió a comer bien, se fastidio de los licuados, va a seguir comiendo y su saciedad también va a cambiar porque va a comer, comer y comer y nunca se va a sentir satisfecho, porque tuvo mucho tiempo a su cuerpo sin recibir comida. Esa persona va a tener más peso del que tenía y el músculo que perdió va a ser muy difícil que lo recupere”, asegura.

La recomendación final de la doctora es evitar las dietas restrictivas, los alimentos 'de moda' para bajar de peso, estar informados y emplear tendencias como los 'smoothies' a nuestro favor, sin perder el control. “El smoothie es una manera diferente de presentarte un alimento, pero si quieres estar sano, debes tener la información necesaria para saber que el smoothie no es la maravilla del mundo, tan sólo es una manera diferente de presentarte una verdura, fruta, cereal y grasa”.