Ataques. En las últimas 48 horas han muerto 68 personas, incluyendo niños. (EFE)
El Ejército israelí lanzó 326 ataques contra Gaza en las últimas 24 horas que causaron la muerte a más de una treintena de personas, entre ellas varios niños, informaron fuentes castrenses en Israel y médicas en la Franja.
Responsables médicos palestinos precisaron, además, que un total 68 palestinos han muerto -la mayoría civiles- y cerca de medio millar han resultado heridos hasta ayer miércoles en estos bombardeos. La oficina de información humanitaria de Naciones Unidas (OCHA) confirmó, por su parte, que siete de las víctimas son niños.
Según Ashraf al Qedra, portavoz de Emergencias de Gaza, otros tres niños más y cuatro mujeres murieron durante bombardeos nocturnos sobre tres casas de la localidad de Jan Yunis, en el sur de la Franja.
En un comunicado enviado a los medios, las Fuerzas Armadas israelíes aseguraron que los bombardeos de ayer miércoles coincidieron con el lanzamiento de 82 cohetes contra el territorio de Israel, 21 de los cuales fueron interceptados por el escudo antimisiles "Cúpula de Hierro". Dos de esos cohetes cayeron en un descampado cercano a la ciudad meridional de Diamona, en el desierto del Neguev, donde Israel tiene su principal centro nuclear. En un comunicado, las "Brigadas "Azedim al Kasem", brazo armado del movimiento islamista Hamas, anunció que había lanzado tres cohetes clase M-75 contra la citada localidad, uno de los cuales fue interceptado por las baterías antimisiles, informó por su parte el Ejército.
La oficina de información castrense señaló, asimismo, que los objetivos fueron túneles, lanzaderas de misiles, bases de instrucción, silos y fábricas de armas y centros de control del movimiento islamista.
Un oficial de alto rango reveló que el Ejército ha golpeado en las últimas 48 horas más objetivos de Hamas en Gaza que durante los ocho días que duró la cruenta operación militar de 2012.
'Pende de un hilo'
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, dijo ayer que está alarmado por la nueva ola de violencia en Gaza, que, afirmó, "está pendiendo de un hilo", y pidió la máxima contención a las partes pues ni esa zona, ni "la región entera" pueden "enfrentarse a otra guerra a gran escala"."El deterioro de la situación (en Gaza y sus alrededores) está conduciendo a una espiral hacia abajo que rápidamente podría ir más allá del control de cualquier parte", afirmó Ban en una rueda de prensa en la sede de la ONU. "Esta es una de las pruebas más críticas a la que se ha enfrentado la región en los últimos años", agregó. Ban dijo que la mayor parte del día la había dedicado a mantener un "diálogo activo" con líderes mundiales y regionales sobre la situación en la franja, en el sur de Israel y en Cisjordania.