La Organización de las Naciones Unidas (ONU) confirmó hoy que “cientos de civiles” fueron masacrados el 15 y 16 de abril pasado en la ciudad de Bentiu, en el estado de Unity, sólo por razón de sus raíces étnicas o su nacionalidad.
De acuerdo con la Misión de la ONU en Sudán del Sur (UNMISS, siglas en inglés), milicianos rebeldes mataron a centenares de civiles después de determinar su identidad, luego de que tomaran el control de Bentiu.
Los rebeldes registraron lugares donde se habían refugiado civiles y extranjeros, incluyendo un hospital, una mezquita, una iglesia y el centro del Programa Mundial de Alimentos (PMA), y mataron a numerosas personas después de identificarlas.
La UNMISS, cuya base fue atacada el pasado 17 de abril, indicó que es necesario reforzar la protección a sus bases en Sudán del Sur, lo que ya ha sido aprobado por el Consejo de Seguridad.
La ONU expresó además su firme condena del uso de la emisora Radio Bentiu FM por parte de algunos líderes de oposición para difundir mensajes de odio y propagar la idea de que ciertos grupos étnicos no deberían permanecer en la localidad.
Asimismo, deploró que incluso se instara a los hombres a cometer actos de violencia sexual contra mujeres de otras comunidades.
