El equipo de baloncesto de Estados Unidos sufrió ayer otra nueva baja importante, la del alero Paul George, de los Pacers de Indiana, que sufrió una grave lesión (fractura) en la pierna derecha. (AP)
Paul George encara una larga y difícil rehabilitación de la grave lesión que sufrió en una pierna, y los médicos creen que podría demorar más de un año en volver a jugar con los Pacers de Indiana.
El alero se fracturó la tibia y el peroné de la pierna derecha el viernes en un partido de fogueo de la preselección de básquetbol de Estados Unidos en Las Vegas. Ahora empiezan las dudas sobre la recuperación de George, y podrá volver a ser uno de los jugadores más completos en la NBA.
George, de 24 años, fue operado el sábado, y el presidente de los Pacers, Larry Bird, dijo que espera que regrese la próxima semana a Indianápolis para empezar el largo proceso de rehabilitación.
"La particularidad con romperse un hueso es que si logras colocarlo en la posición correcta, puede quedar como nuevo", comentó el doctor James Gladstone, codirector de medicina deportiva de la escuela Icahn en el hospital Monte Sinaí de Nueva York. "Si el músculo no está involucrado y el hueso y el músculo sanan por completo, entonces creo que puede volver a recuperar (su condición previa)".
Gladstone, quien no atiende a George, indicó que los atletas usualmente necesitan entre nueve y 12 meses para recuperarse por completo de este tipo de lesión. Tomando en cuenta ese cronograma, lo más pronto que George estaría en las cancha sería en mayo de 2015, en plenos playoffs de la próxima temporada de la NBA.
Si George se pierde toda la temporada, tendría casi 15 meses enteros antes de comenzar la campaña de 2015-16, un cronograma que coinciden con el pronóstico del doctor Patrick Kersey. Kersey, un médico del Centro Deportivo St. Vincent en Indianápolis, es el director médico de la federación estadounidense de fútbol americano y atendió al escolta de la universidad de Louisville, Kevin Ware, cuando sufrió una espeluznante lesión similar durante los playoffs de la NCAA en 2013.
Aunque Kersey tampoco atiende a George, indicó que probablemente el hueso demore entre seis y 12 semanas en sanar por completo, y el basquetbolista necesitaría otras seis a 10 semanas para volver a caminar normalmente. Kersey dijo que, si todo sale bien, George podría volver a la cancha entre seis a 12 meses, aunque advirtió que podría demorar hasta 18 meses en recuperar su antigua condición.
