Salud. La pequeña despertó del sueño inducido en el que la mantenía tras caer de lo alto de un puente peatonal.
"Dios es muy grande, sigue viva mi hija", dijo Erika Judith al ver que su pequeña Britzany despertaba del sueño inducido en el que la mantenía tras caer de lo alto de un puente peatonal, el pasado 19 de enero.
La niña salió de terapia intensiva para ser trasladada a un cuarto de aislamiento donde es cuidada por doctores, enfermeras y sus padres.
La niña ya come por sí sola y tiene movimiento en sus manos.
Su joven madre platicó que fueron momentos muy angustiantes los que pasó sin ver a su pequeña, de tan sólo un año cuatro meses, luego de ingresar a terapia intensiva con un traumatismo craneoencefálico severo que le causó la caída.
Contra todo mal pronóstico, los doctores del Hospital General, donde fue atendida, así como la pequeña, lucharon por su vida. El esfuerzo, hasta hoy, no ha sido en vano, pues la menor evoluciona satisfactoriamente.-
Erika Judith agradeció a toda la gente que ha estado al pendiente de su hija, así como al alcalde de Torreón, Miguel Riquelme, y a su esposa, Marcela Gorgón, por el apoyo brindado, pues el ayuntamiento corrió con los gastos del hospital y al personal de esta institución por todas las atenciones que les brindan.
Agradecida
La mamá de la pequeña dijo que se siente "agradecida con todos, con Dios por hacernos el milagro y los doctores por ser ellos quienes fueron movidos por Él para salvar a mi hija".