Migrantes. Sacerdote Pedro Pantoja Arreola.
Los abusos y las muertes de migrantes continúan, aseguró el padre Pedro Pantoja Arreola, asesor de Belén, Casa del Migrante Saltillo quien manifestó que hace un mes en el desierto de Altar en Sonora, el sacerdote de la casa del migrante de Altar recogió 36 cadaveres de migrantes asesinados por el crimen organizado.
"Casi se empató las fechas, por eso casi nadie supo ni nadie se pronuncio, sólo nosotros con el acontecimiento de Tlatlaya, pero el padre, dentro de nuestras redes apareció eso", afirmó.
Explicó que después de Hermosillo, a hora y media comienza el desierto de Altar hasta el Sasabe para Arizona, después ahí se ubica la Casa del Migrante de Altar.
"En ese camino que recorrido, se camina más o menos en unas combis malditas alrededor de ocho horas, ahí es terreno del crimen organizado, tal vez los llevaban de burreros, tal vez de sicarios, que en un momento dado ya no les sirven y los destrozan", señaló. Dijo que los hechos ocurridos en Ayotizinapa han tenido un gran impacto, es una homología, pues incluso estuvo tanto en Tlatlaya como Ayotzinapa.
"Ya somos una red de la sociedad civil, todos estamos unidos, defensores de derecho, también con los defensores por ejemplo del Centro de los Jesuitas, es donde se recogió a las madres de los normalistas, tanto de los asesinados como de los desaparecidos, ya somos un colectivo grande", aseguró.
Asimismo destacó que en Coahuila a pesar de que no se han registrado muertes de migrantes, sí hay un gran número de desaparecidos y secuestrados, donde de los 300 desaparecidos que hay en Allende también hay migrantes; y en Acuña y Piedras Negras, se tiene conocimiento de al menos cinco migrantes desaparecidos, por lo que calificó que Coahuila es un desastre.