Crisis. La CNDH se encuentra en el punto de mira de la crítica por el dispendio de presupuesto y su ineficiencia laboral.
De acuerdo con el Proyecto de Presupuesto de Egresos 2015, el gobierno federal pidió al Congreso de la Unión un monto de mil 465 millones 956 mil 43 pesos para la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), lo que representa un aumento de 49 millones 574 mil 997 pesos respecto a los recursos que actualmente ejerce y que son de mil 416 millones de pesos.
Del total solicitado para el siguiente año, mil 401 millones 700 mil 56 pesos serían para pago de salarios, compensaciones, arrendamiento de inmuebles, pasajes, viáticos, teléfonos y adquisición de vehículos, entre otros.
Mientras que para la promoción y defensa de los derechos humanos se emplearían 64 millones 255 mil 987 pesos.
Se publicó ayer que organizaciones civiles perciben a la CNDH como una institución costosa y lenta, que ha incrementado su presupuesto 55.21 % en los últimos cuatro años y cuyas recomendaciones son cada vez menores en número.
Para el director ejecutivo de Amnistía Internacional en México, Perseo Quiroz, el monto de lo que se ha invertido en la comisión no es lo preocupante, sino que se debe evaluar si esos recursos han impactado de manera positiva en los ciudadanos.
Destacó que el organismo debe conducirse con transparencia, rendir cuentas, apoyar a las víctimas, trabajar con agrupaciones civiles y responder a la población.
A pesar de los cuestionamientos, el presidente de la CNDH, Raúl Plascencia no ha dado su punto de vista sobre la situación, ni se ha podido conocer la versión oficial de unos hechos que lastiman al erario y "a la confianza de la ciudadanía en una institución tan importante para México, y para sus habitantes", precisó AI.