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PIÉNSALE, PIÉNSALE

Caridad vs Caridad

ARTURO MACÍAS PEDROZA

¿Qué término utilizar? "Amor" tiene una significación tan variada que podría originar equívocos; "Caridad", la virtud reina de todas las demás virtudes, pero recuerda, asimismo, la limosna, que, si puede ser su encarnación puede también camuflar y coartar una realidad tan amplia y elevada. El término "Agápe", opuesto a Eros, podría expresar mejor la realidad de la búsqueda desinteresada del bien del otro, ¡Lástima que sea un término griego y suene entre nosotros a un barbarismo! Una vez aclarado esto, podremos usar el término que nos parezca, el problema no es la palabra en sí, sino su errónea comprensión que puede hacernos caer en manos de desamores o caricaturas que se disfrazan de esta realidad que es más profunda y misteriosa.

Algunos se aprovechan del sentimiento natural de compasión, inherente a todo ser humano, engañando a muchos con verdaderas actuaciones dignas del mejor actor; profesionistas de la mentira, nos hacen creer que con una pequeña contribución impersonal y poco comprometida, se está cumpliendo el deber de amor al prójimo. La aparente "ayuda" se convierte frecuentemente en un daño, no sólo para el que la recibe, sino también para quien la ofrece, creyendo con ello cumplir el compromiso y la responsabilidad con la justicia y con la construcción de una comunidad solidaria. Nuestra apatía y falta de participación en los asuntos públicos, los sustituimos con estos actos, no carentes de buena intención, pero que no son verdadero amor. Algunos se excusan con el clásico: "El sabrá si lo utiliza mal, yo lo hago de buena intención". Pero un acto de amor por un necesitado no lo esclaviza ni lo denigra, sino que se compromete con él para cambiar las circunstancias que lo han llevado a esa situación.

El sistema económico y social que se está llevando en México, está produciendo más y más pobres, acentuándose hasta convertirse en exclusión. No podemos dejar de ayudar a los más necesitados, pero es mejor detener las causas que están produciendo esta pobreza. La situación interpela a nuestra conciencia. ¡Basta de estar tratando de remediar superficialmente lo que es un problema estructural¡ ¡Basta de intentar inútilmente de asistir con limosnas las víctimas que las estructuras injustas están produciendo! El nuevo rumbo que está tomando el Gobierno federal con los programas de desarrollo que modifican a "oportunidades" con "prospera", están intentando pasar de asistencialismo a la promoción de la producción y desarrollo de capacidades y oportunidades para la población más vulnerable, sin embargo, el sistema sigue siendo el mismo neoliberalismo y las causas de la pobreza siguen siendo muchas: Los pobres son la inmensa mayoría de los mexicanos y no sólo debemos trabajar "para ellos", sino sobre todo "con ellos", de tal manera que sean sujetos de su propio desarrollo. La participación social efectiva por medio de organizaciones sociales, será una opción válida: Cooperativas de consumo, asociaciones, producción artesanal, huertos urbanos, economía solidaria. El mismo sistema nos ha querido hacer creer que no había otra alternativa. El dolor de nuestro pueblo no es sólo por hambre, sino por justicia, por democracia verdadera, por trabajos dignos, por un desarrollo armónico y no sólo económico, educación de calidad. No son sólo 43 estudiantes los que hay que encontrar, no son sólo 24 policías los que hay que encerrar, un buen aguinaldo no es suficiente para superar las deudas de un trabajador, una despensa es una burla de parte de quien, en razón de su cargo, tiene la responsabilidad de promover la justicia, y sin embargo, incluso se vuelve parte de los que roban o matan y producen más pobreza. No basta una forzada declaración de las autoridades para superar la desinformación, el caos, la confusión y la impunidad.

Y, sin embargo, la política es el medio privilegiado para amar, porque tiene la posibilidad de cambiar las estructuras que producen pobreza e injustica. Hacer política en este sentido podría dignificarla, ahora que está tan desvirtuada. La participación política y el ejercicio de la democracia por parte de todos los ciudadanos es una mejor forma efectiva de ayudar a los más necesitados. Nadie debería de quedar exento de participar y apoyar las iniciativas que ya existen y que promueven ayuda efectiva y recuperación de espacios como Cáritas, Ruedas del Desierto, Laguna yo te Quiero, ELLA, Laguneros por la paz, Rotarios, Club de Leones, y tantos otros. Cada "ciudadano", por el simple hecho de serlo, está obligado a participar de una u otra forma en el desarrollo de la comunidad. "Justicia es el nuevo nombre de la paz" (Pablo VI), "si quieres la paz, trabaja por ella" (Teresa de Ávila), exigencia de transparencia, rendición de cuentas, lucha contra la corrupción, Elaboración de la Ley General de Víctimas en el estado, colaboración y corresponsabilidad desde las autoridades y la sociedad civil. Etc, etc, etc; tenemos la posibilidad de cambiar las circunstancias que producen la injustica, la violencia y la pobreza.

La Laguna está en transición en las distintas esferas de su vida, social, económica, política y cultural. ¿Qué sucede con los laguneros? ¿Es posible vivir de acuerdo a su dignidad? ¿Seguiremos pidiendo limosna? ¿Cuáles son las exigencias de la justicia social en nuestra región (transporte interurbano, trabajo, seguridad, justicia, transparencia…)? ¿Ha encontrado la región el camino del desarrollo integral? ¿Qué tanto prevalece en nuestros días la búsqueda del bien común por encima de la búsqueda egoísta de los intereses individuales o de grupo? ¿En verdad queremos ayudar a los necesitados? ¿Estamos participando en algún movimiento, asociación o grupo que ayude real y efectivamente a los demás, respetando su dignidad? ¿Nuestras acciones amorosas han logrado incidir en la transformación de situaciones de marginación, injusticia o violencia? ¿Hacemos acciones comprometidas y colaborativas en la reconstrucción del tejido social? ¿Aprovechamos las organizaciones existentes en nuestra región para emprender acciones concretas que hagan respetar la persona humana? ¿Somos políticos y/o usamos la política para promover amorosa y efectivamente el bien común?... Piénsale.

piensalepiensale@hotmail.com

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